Un l¨ªder guerrillero narra en un libro "el desastre de la revoluci¨®n en Cuba"
Fue campesino hasta que su deseo de justicia le llev¨® a alistarse en las filas de la revoluci¨®n y analfabeto hasta que pudo aprender a leer y escribir mientras ocupaba altos cargos en el r¨¦gimen comunista. Naci¨® en 1939 en Manzanillo y se llama Dariel Alarc¨®n Ram¨ªrez, pero sirvi¨® a las ¨®rdenes de Fidel Castro y de Ernesto Che Guevara con el nombre de Benigno. Ese desencantado dirigente tom¨® el camino del exilio en 1994 y se afinc¨® en Par¨ªs, donde public¨® sus memorias, ahora editadas en espa?ol. "La revoluci¨®n ha sido un desastre, porque fallaron tanto el sistema comunista como los dirigentes, empezando por Fidel", afirma.
A pesar de los a?os pasados en puestos clave de la seguridad y del espionaje cubanos, las manos de Benigno delatan su pasado campesino y guerrillero. Alto y huesudo, de hablar pausado, Daniel Alarc¨®n muestra su absoluto desencanto con la revoluci¨®n cubana hasta el punto de sentenciar: "Cuba ha demostrado el final de la utop¨ªa del comunismo". Pero todav¨ªa va m¨¢s lejos cuando sostiene que una transici¨®n democr¨¢tica y pac¨ªfica deviene imposible en Cuba, porque Castro se niega. "Fidel es muy testarudo", confiesa, "y no se deja aconsejar por nadie. Cree que es la ¨²nica persona capaz de resolver los problemas del pueblo cubano, es decir, piensa que es indispensable. La realidad es que, despu¨¦s de cuarenta a?os, Cuba est¨¢ sumida en la miseria y sometida a una dictadura f¨¦rrea que lo controla todo".Benigno decidi¨® exiliarse en 1994, persuadido de que la disidencia desde dentro del sistema era una misi¨®n imposible. Vigilado y perseguido por el r¨¦gimen castrista en Par¨ªs, s¨®lo la en¨¦rgica actitud de los servicios de seguridad franceses le ha permitido vivir con un cierto sosiego. Desde la di¨¢spora public¨® unas memorias que ayer present¨® en Madrid con el significativo t¨ªtulo de Memorias de un soldado cubano. Vida y muerte de la revoluci¨®n (Tusquets). En su opini¨®n, la descomposici¨®n del r¨¦gimen de Castro llega a tales extremos que los jefes de su mujer, oficial de la Seguridad cubana, la animaron con envidia a que se marchara al extranjero y no volviera.
Malestar en el Ej¨¦rcito
Benigno se?ala que el acelerado deterioro de las condiciones de vida en Cuba puede provocar otro estallido social como en el verano de 1994, cuando miles de cubanos abandonaron la isla en balsas camino de las costas de Florida. No obstante, el r¨¦gimen lo controla todo, seg¨²n confiesa este dirigente, que ha partipado durante d¨¦cadas en estos mecanismos dictatoriales. "De todos modos", matiza, "el malestar m¨¢s peligroso para el r¨¦gimen se centra ahora en las Fuerzas Armadas. Ra¨²l Castro est¨¢ planteando un pulso de poder a su hermano Fidel porque la capacidad adquisitiva de los militares se degrada y los condena a la pobreza y a tener que recurrir a peque?as corruptelas". Benigno guarda, pese a todo, una devoci¨®n por el Che, a cuyas ¨®rdenes directas combati¨® tanto en ?frica como en Bolivia. Quiz¨¢ la muerte temprana del m¨ªtico revolucionario haya contribuido a mantener en la esfera de la pureza al barbudo que muriera en un enfrentamiento con el Ej¨¦rcito boliviano en octubre de 1967. Los sobrevivientes de aquella emboscada, entre los que se hallaba Benigno, lograron huir. Hombre m¨¢s de acci¨®n que de reflexi¨®n, Dariel Alarc¨®n Ram¨ªrez public¨® sus memorias en Francia a modo de testimonio oral un tanto disperso. Por ello, Tusquets encarg¨® a la escritora y traductora Elisabeth Burgos -casada en Bolivia en 1968 con R¨¦gis Debray, escritor y colaborador del Che- una adaptaci¨®n m¨¢s literaria de los recuerdos.
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