La lengua de todos
EL PRIMER Congreso Internacional de la Lengua Espa?ola ha reunido en Zacatecas (M¨¦xico) a especialistas en lenguaje, acad¨¦micos, escritores, cineastas, periodistas, profesores... Casi un centenar de ponentes estudiosos de la palabra y m¨¢s de 800 participantes de todo el mundo que habla espa?ol. Un hecho hist¨®rico que ha servido para acercar las distintas expresiones de nuestro idioma, estudiar conjuntamente sus problemas y acabar con las incomprensiones mutuas. Si una caracter¨ªstica general ha mostrado este congreso -subdividido en grupos de trabajo, mesas redondas, presentaci¨®n de proyectos y unido en sus sesiones plenarias-, ¨¦sa ha sido el respeto rec¨ªproco entre los diferentes sonidos y concepciones del espa?ol. Esta actitud rompe formalmente con una oscura tradici¨®n de imposiciones desde la Pen¨ªnsula y tambi¨¦n con los justos recelos mostrados desde las comunidades americanas.Por todo ello, este congreso, organizado por el Gobierno mexicano y el Instituto Cervantes espa?ol, ha constituido un ¨¦xito cuyas consecuencias favorables se notar¨¢n probablemente durante los pr¨®ximos a?os. La sociedad hispanohablante, cabalmente representada en Zacatecas, ha expresado el deseo de mantener su idioma com¨²n y defenderlo ante la invasi¨®n anglosajona, que llega principalmente por la v¨ªa inform¨¢tica.
El ¨¦xito de este acontecimiento viene dado tambi¨¦n porque, adem¨¢s, no se ha tratado de una reuni¨®n dedicada a la mera reflexi¨®n conjunta. En Zacatecas se han presentado obras y proyectos de gran alcance, como la creaci¨®n de un espacio cibern¨¦tico de encuentro entre culturas, promovido por el Cervantes; el anuncio de un nuevo doctorado latinoamericano de Ciencias de la Informaci¨®n; el futuro museo de la palabra (con sede en El Salvador); o la cercana elaboraci¨®n de -unas normas de uso com¨²n para que los peri¨®dicos de Espa?a y Latinoam¨¦rica puedan dar respuesta a las novedades grafem¨¢ticas y de vocabulario que deben plantearse d¨ªa a d¨ªa y que hasta ahora resolv¨ªan por separado; o un magn¨ªfico y enciclop¨¦dico diccionario geogr¨¢fico universal con todas las toponimias y gentilicios del espa?ol, elaborado por el acad¨¦mico mexicano Guido G¨®mez de Silva; o la propuesta para que los libros circulen sin arancel en el ¨¢mbito de habla hispana, sugerida por el ex presidente colombiano Belisario Betancur.
Los aspectos negativos del congreso parten de lo anecd¨®tico, pero no por ello dejan de ser significativos. La aventurada propuesta inicial del Nobel Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez sobre la supresi¨®n de algunas letras del alfabeto ha desatado un debate exterior -en las sesiones del congreso apenas tuvo repercusi¨®n- que ha oscurecido otros aspectos m¨¢s relevantes de las se siones. Las grescas internas de los representantes espa?oles, ya fuera para desmarcarse de las propuestas de manual period¨ªstico com¨²n, para lanzar al aire reproches por ausencias o presencias institucionales o para criticar algunos bienintencionados proyectos, han dado una dudosa medida de la capacidad conciliadora que Espa?a debe aportar al espacio com¨²n del castellano: una lengua rica, diversa, hermosa y fuerte.
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