Los b¨²lgaros se preparan ante las duras medidas de choque del nuevo Gobierno
Zoltan bailotea bajo la llovizna junto a la catedral Alexander Nevski en el concierto-mitin organizado por la coalici¨®n anticomunista b¨²lgara para celebrar su rotunda victoria del s¨¢bado sobre los rojos. "Aprovecho porque no s¨¦ cu¨¢nto tiempo pasar¨¢ hasta que pueda volver a ver gratis a mis cantantes favoritos". Desempleado, de 26 a?os, sabe, como el resto de sus conciudadanos, que ser¨¢ breve la luna de miel entre los vencedores y sus votantes.
La euforia de la celebraci¨®n dejar¨¢ paso esta misma semana a los efectos de la liberalizaci¨®n de precios de los combustibles anunciada por el Gobierno interino. La catarata de medidas de choque llegar¨¢ a partir de mayo pr¨®ximo, cuando asuma el poder el nuevo Gabinete de Iv¨¢n Kostov, el jefe de los vencedores, que ayer dec¨ªa a sus seguidores: "Hemos resucitado como L¨¢zaro".En las cuartas elecciones generales en Bulgaria tras la ca¨ªda del comunismo, cuyos resultados oficiales se anunciar¨¢n hoy, el frente conservador Fuerzas Democr¨¢ticas Unidas se ha alzado con el 52% de los votos y una abultada mayor¨ªa absoluta parlamentaria. Los socialistas (ex comunistas), que, tras controlar la mayor¨ªa de los Gobiernos habidos desde 1989, renunciaron en febrero a finalizar su mandato debido a las masivas protestas populares contra su gesti¨®n, se han desplomado a un 22% de los sufragios. La participaci¨®n, del 62%, ha sido la m¨¢s baja que se recuerda; y el voto de los j¨®venes y el de la poblaci¨®n urbana se han inclinado masivamente hacia el cambio.
El Gobierno provisional de Stefan Sofianski se ha ganado el respeto popular al conseguir en dos meses rescatar al lev de la sima de 3.000 por d¨®lar, hasta colocarlo en torno a 1.500, y controlar la escasez de pan y combustibles. Pero lo peor est¨¢ por venir, con el triunfador Kostov, cuando, en un pa¨ªs que ha superado el 2.000% de inflaci¨®n en los ¨²ltimos doce meses (se anuncia un billete de 100.000 levs), comiencen a cerrarse empresas estatales ruinosas y a liquidarse bancos insolventes. Y el Fondo Monetario Internacional (FMI), seg¨²n lo pactado, arrebate literalmente al Gobierno la capacidad de decisi¨®n econ¨®mica y al Banco de Bulgaria la llave de la m¨¢quina de imprimir dinero.
Tras largas negociaciones, el FMI ha prestado, recientemente a Bulgaria casi 700 millones de d¨®lares (m¨¢s de 28.000 millones de pesetas), y otras instituciones crediticias internacionales, como el Banco Mundial o el Club de los 24, apoyar¨¢n al pa¨ªs balc¨¢nico con otros 500 millones en los pr¨®ximos meses para impedir su colapso.
Ante la magnitud de la tarea, Iv¨¢n Kostov, asegur¨® ayer que invitar¨¢ a unirse al futuro Gobierno a otros partidos que compartan los cuatro puntos -hasta la v¨ªspera eran tres- que considera pilares de su gesti¨®n. A saber: las reformas econ¨®micas pactadas con el Fondo Monetario; la lucha contra el crimen organizado y la corrupci¨®n ("no es un secreto que nuestro pa¨ªs est¨¢ en manos de delincuentes y matones", dijo ayer); impulsar a Bulgaria hacia la OTAN y la Uni¨®n Europea, y el a?adido de abrir los archivos secretos de la polic¨ªa sobre las figuras p¨²blicas. Proyectil ¨¦ste destinado a la anulaci¨®n pol¨ªtica de cualquier estrecho colaborador del difunto r¨¦gimen comunista.
El futuro primer ministro descarta un pr¨®ximo refer¨¦ndum sobre la restauraci¨®n de la Monarqu¨ªa en Bulgaria. En el terreno exterior, el nuevo Gobierno tendr¨¢ que ingeni¨¢rselas para hacer compatibles sus rotundas aspiraciones a integrarse en la Alianza Atl¨¢ntica con su dependencia energ¨¦tica de Rusia.
La semana pasada, Sof¨ªa y Mosc¨² firmaron un acuerdo para la construcci¨®n y mantenimiento de un gasoducto que acarrear¨¢ hacia los Balcanes, pasando por Bulgaria, el gas del vecino gigante. Bulgaria est¨¢ a merced del petr¨®leo ruso7 y el Kremlin intenta vincular los acuerdos energ¨¦ticos a la compra de aviones Mig 29. Sof¨ªa se resiste, al igual que al control por su antiguo patr¨®n del 75% de la principal refiner¨ªa b¨²lgara, Neftochim, a la que Rusia abastece de materia prima y cuya privatizaci¨®n est¨¢ anunciada.
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