La mentira "absoluta" domina el mundo actual, afirma Derrida

Jacques Derrida defini¨® ayer la edad contempor¨¢nea como la de la entronizaci¨®n de "la mentira absoluta y definitiva". El fil¨®sofo franc¨¦s pronunci¨® una conferencia en la Residencia de Estudiantes, de Madrid, con el t¨ªtulo de Estados de la mentira, mentira de Estado. Proleg¨®menos para una historia de la mentira. Derrida afirm¨®: "Lo relevante en la mentira no es nunca su contenido, sino la intencionalidad del que miente. La mentira no es algo que se oponga a la verdad, sino que se sit¨²a en su finalidad: en el vector que separa lo que alguien dice de lo que piensa en su acci¨®n discursiva referida a los otros. Lo decisivo es, por tanto, el perjuicio que ocasiona en el otro, sin el cual no existe la mentira", explic¨® anoche el fil¨®sofo franc¨¦s.Para Derrida, "buena parte de lo que se ha dado en llamar, con Fukuyama, final de la historia, tiene mucho que ver con ese apogeo de la mentira absoluta por contraposici¨®n al saber absoluto hegeliano". "Sabemos que el espacio pol¨ªtico es el de la mentira por excelencia; y mientras que la mentira pol¨ªtica tradicional se apoyaba en el secreto, la mentira pol¨ªtica moderna ya no esconde nada tras de s¨ª, sino que se basa, parad¨®jicamente, en lo que todo el mundo conoce", indic¨® el autor de La escritura y la diferencia.

Derrida reivindic¨® la necesidad de ensayar una historia de la mentira, que para lograr su eficacia debe hacerse, se?al¨®, "en un sentido extramoral". "Hay que olvidar la l¨®gica maniquea de verdad y mentira, y centrarlos en la intencionalidad de quienes mienten", subray¨®. Un serio escollo para este nuevo inventario de la mentira en un sentido "extramoral" es, a su juicio, la l¨®gica impuesta por los medios de comunicaci¨®n de masas. "La proliferaci¨®n de im¨¢genes virtuales que sus c¨®digos sustentan terminan por borrar el original, destruyen el archivo donde rastrear la verdad y se convierten, de ese modo, en estrat¨¦gicas mentiras de nadie", diagnostic¨®. E invit¨® a husmear en las intencionalidades, tanto pol¨ªticas como medi¨¢ticas, para detectar mentiras m¨¢s ac¨¢ de lo no verdadero.