Espectacular reaparici¨®n del general Powell en la escena pol¨ªtica de EE UU
Colin Powell es omnipresente estos, d¨ªas en los medios norteamericanos y siempre le hacen la misma pregunta: "?Se presentar¨¢ a las elecciones presidenciales en el a?o 2000?". Powell sonr¨ªe, responde que ahora no quiere hablar de eso y se lanza a explicar el porqu¨¦ de su espectacular reaparici¨®n en el escenario p¨²blico norteamericano: ha lanzado una cruzada para resucitar entre los ni?os y j¨®venes "el sue?o americano".
El hombre al que una mayor¨ªa de sus compatriotas desear¨ªa ver en la Casa Blanca ser¨¢ ma?ana, domingo, el anfitri¨®n en Filadelfia de la denominada Cumbre de los Presidentes para el Futuro de Estados Unidos. Sus invitados ser¨¢n Bill y Hillary Clinton, Al Gore, George Bush, Jimmy Carter, Gerarld Ford y Nancy Reagan, que representar¨¢ a su esposo, ausente por enfermedad. Pero, adem¨¢s, a Filadelfia acudir¨¢n figuras del mundo del espect¨¢culo como el actor John Travolta, y 30 gobernadores de Estados, 90 alcaldes de ciudades, cientos de ejecutivos de grandes empresas y multitud de cl¨¦rigos y dirigentes de organizaciones humanitarias.Powell, de 60 a?os, quiere que todos ellos se comprometan en su cruzada, en su llamamiento a favor del voluntariado para salvar a los ni?os y los j¨®venes de EE UU. Y es que el general que lider¨® en la guerra del Golfo la mayor alianza militar desde la 11 Guerra Mundial cree que la amenaza m¨¢s seria ahora para EE UU no es la ampliaci¨®n de la OTAN al Este, la creciente potencia de las naciones asi¨¢ticas o el integrismo musulm¨¢n. La amenaza est¨¢ en casa y el frente que quiere abrir es interior.
"Nuestro principal problema", predica el que hasta hace tres a?os fue cabeza de la junta de jefes de Estado Mayor, "es que cada vez m¨¢s j¨®venes se desenganchan del modelo de vida norteamericano, son cada vez m¨¢s esc¨¦pticos sobre el sue?o norteamericano". Tres de cada cuatro compatriotas suyos coinciden con este an¨¢lisis. Y tambi¨¦n las cifras: 15 millones de ni?os norteamericanos, seg¨²n los estudios oficiales, corren serio peligro de caer en el paro, la delincuencia, las drogas, la marginaci¨®n... El fracaso escolar, la violencia en los centros de ense?anza, los embarazos prematuros, el suicidio, el consumo de drogas, todo eso, se dispara de modo peligroso en una sociedad que conoce una edad de oro de crecimiento econ¨®mico y ausencia de enemigos exteriores.
Pero Powell no es un socialdem¨®crata ni, como se les llama en EE UU a los partidarios de la intervenci¨®n del Estado, un "liberal". Es un cristiano conservador que no cree que los graves problemas de la infancia y la juventud de EE UU deban resolverse con gasto p¨²blico, con los impuestos. ?l, como millones de sus compatriotas, cree en el voluntariado, en la acci¨®n desde la implicaci¨®n personal, con trabajo o con dinero.
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