Los grabados de Picasso acaparan una exposici¨®n del Museo Britanico

El Museo Brit¨¢nico ha reunido una colecci¨®n de 163 grabados en una exposici¨®n dedicada a la evoluci¨®n de esta forma de arte durante el siglo XX. Aunque las piezas pertenecen a un total de 58 artistas, la muestra sobre todo destaca la creatividad e innovaciones t¨¦cnicas de la obra de Picasso, el m¨¢s importante artista-grabador del periodo. ?nico entre sus contempor¨¢neos por su dominio de las artes pl¨¢sticas, tanto en pintura como en escultura y grabado, Picasso marca el principio y final de la exposici¨®n del Museo Brit¨¢nico.

La muestra arranca con Le repas frugal, el primer aguafuerte que realiz¨® Picasso al instalarse en Par¨ªs en el a?o 1904, y concluye con una serie de grabados que el artista malague?o termin¨® poco antes de su muerte, en 1974.La exposici¨®n recorre cada cap¨ªtulo en la historia del grabado del siglo XX, una historia que recoge c¨®mo los artistas de todo el mundo empujaron las barreras del arte hacia nuevas y radicales direcciones. Esto fue posible gracias a ellos y tambi¨¦n por el magnetismo que ejerci¨® la ciudad de Par¨ªs, centro art¨ªstico hasta la d¨¦cada de los sesenta. La adecuada infraestructura de talleres, marchantes y editores especializados en esta forma de expresi¨®n convirtieron a la capital de Francia en capital del grabado.

Al tiempo que Picasso se concentr¨® en Le repas frugal, un grabado relacionado con las pinturas de su periodo azul, Mattisse realiz¨® una serie de litograf¨ªas de extraordinarias l¨ªneas expresivas. Se trata de unos desnudos y bustos grabados al tiempo que el maestro franc¨¦s preparaba su ambiciosa pintura, Joie de vivre.

En madera

El esp¨ªritu innovador llev¨® a ambos genios y a sus contempor¨¢neos -Braque, Derain, Dufy y Vlaminck, entre otros- a investigar las posibilidades del grabado en madera y a experimentar, poco despu¨¦s, con formas cubistas.Un retorno a la figuraci¨®n y clasicismo domin¨®, sin embargo, el arte del periodo de entre guerras. Stephen Coppel, comisario de la exposici¨®n, destaca Retrato de Vollard II, realizado por Picasso en 1937, entre las obras m¨¢s representativas de esta fase.

De esta ¨¦poca datan tambi¨¦n las expresiones art¨ªsticas de los exiliados espa?oles en contra del fascismo, que documenta en profundidad la exposici¨®n londinense. En obras como la serie de caricaturas Sue?o y mentira de Franco y Cabeza de mujer con boina, Picasso no s¨®lo ridiculiza a Franco, sino que esboza esas figuras suplicantes presentes en el Guernica.

6.000 grabados

Ejemplos gr¨¢ficos de Julio Gonz¨¢lez y Joan Mir¨® tampoco faltan en la muestra, en la que tambi¨¦n destacan las expresiones y gestos abstractos de Hans Hartung y otros artistas que dominaron el campo del grabado parisiense durante los a?os cincuenta.Las 163 obras expuestan est¨¢n seleccionadas, en su gran mayor¨ªa, entre los fondos de la propia colecci¨®n del Museo Brit¨¢nico. Con m¨¢s de 6.000 grabados modernos -que se pueden conocer durante todo el a?o con un pase especial- el fondo del Museo Brit¨¢nico tan s¨®lo es superado en importancia por la colecci¨®n de la Biblioteca Nacional de Par¨ªs. La obra de Picasso y sus contempor¨¢neos est¨¢ abierta al p¨²blico hasta mediados del pr¨®ximo mes de septiembre.