Jean-Paul Belmondo, estrella de Cineman¨ªa
Simp¨¢tico, un poco c¨ªnico, aventurero y caradura adorable, Jean-Paul Belmondo (Neully-sur-Seina, 1933) sigue siendo uno de pocos divos que le quedan al cine europeo. A pesar de que desde los a?os ochenta ha ido espaciando sus actuaciones, su huella se perpet¨²a a¨²n en varias generaciones de cin¨¦filos, para quienes su rostro ser¨¢ siempre el del amoral y encantador protagonista de Al final de la escapada, de Jean-Luc Godard.Hasta 1960 era un consumado actor teatral, espec¨ªilizado en los cl¨¢sicos. Su aparici¨®n, de la mano de algunos de los principales realizadores de la llamada Nouvelle Vague (Godard, Chabrol) y de cineastas anteriores (Melville), le convirtieron en punto de referencia obligado y en espejo de una generaci¨®n que am¨® con ¨¦l a Catherine Deneuve (La sirena del Mississippi, de Truffaut y Pierrot el loco, tambi¨¦n de Godard).
El ciclo que a partir de hoy (21.30) le dedica el canal tem¨¢tico Cineman¨ªa no incluye estos conocidos filmes sino los de su etapa posterior, cuando desde los 70 era ya, con permiso del incombustible Alain Delon, el actor mejor pagado del cine europeo.
As de ases (1982) de G¨¦rard Oury es el largometraje que inaugura el ciclo. El s¨¢bado 7 le sigue el El profesional (1981), de Georges Lautner, su filme m¨¢s taquillero de los 80 y el d¨ªa 14, Hold up-Asalto al Banco de Montreal (1985) de Alexandre Arcady. En Stavisky, de Alain Resnais (mi¨¦rcoles 18), Belmondo interpreta a un estafador franc¨¦s. Tambi¨¦n es un estafador en El incorregible (1975), de Philippe de Brocka (s¨¢bado 21), y maleante en Rufianes y, tramposos (1983), de Henri Vemeull (viernes 27), y en Simp¨¢tico y caradura (1984) de Lautner, el filme que cierra el cielo el s¨¢bado 28.
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