Blair y Jospin denuncian que la construcci¨®n europea se hace "la espaldas de los ciudadanos"
Los primeros ministros del Reino Unido y Francia, Tony Blair y Lionel Jospin, no dejaron ayer t¨ªtere con cabeza en el estado actual del proceso de construcci¨®n europea, una Europa monetarista "construida a espaldas de los ciudadanos". Nadie est¨¢ contento con Europa y sus instituciones, tron¨® Blair. "Vayamos a la Europa social frente a la econ¨®mica", dijo Jospin. El ¨²nico padre de Maastricht en el congreso de los socialistas europeos era Felipe Gonz¨¢lez, quien se?al¨®: "Espero que nadie pida que se retrase el euro; si se incumple el tratado, el horizonte de la moneda ¨²nica ser¨¢ incierto".
El alem¨¢n Rudolf Scharping, presidente del Partido de los Socialistas Europeos (PSE), recibi¨® con entusiasmo a los dos nuevos mandatarios que engrosan la heterog¨¦nea tribu socialdem¨®crata. Los asistentes, procedentes de toda Europa, aplaudieron con entusiasmo el brioso discurso de cambio pronunciado por Blair.M¨¢s de un congresista dio un respingo cuando Blair se refer¨ªa a los presentes como representantes de los partidos "de centro y centro-izquierda", al tiempo que animaba a sus correligionarios a que se apropien, arrebat¨¢ndosela a la derecha, la defensa de la familia y de la lucha contra el crimen. El pol¨ªtico ilustr¨® a los presentes con las l¨ªneas del programa que le ha llevado a su rotunda victoria, antes de advertir que con los mimbres actuales para la construcci¨®n europea no se va a ninguna parte. "Las instituciones comunitarias son obsoletas y el mercado ¨²nico y la Uni¨®n Econ¨®mica y Monetaria no funcionar¨¢n si no hay empleo; necesitamos una Europa reformada que acabe con el esc¨¢ndalo de 18 millones de parados".
Por fin, Blair hab¨ªa llegado al tema estrella, la lucha contra el paro. El lunes, el ministro brit¨¢nico de Econom¨ªa, Gordon Brown, presentar¨¢ en su primera reuni¨®n del Ecofin una propuesta detallada para la creaci¨®n de empleo.
"Al Partido Laborista le dije 'o nos modernizamos o perecemos', y lo mismo digo aqu¨ª", se?al¨® Blair para reclamar un cambio total de la construcci¨®n europea.
La intervenci¨®n del veterano Jospin se desliz¨® por par¨¢metros cl¨¢sicos ideol¨®gicos, aunque. igual de rupturistas que Blair en el proceso europeo. "El socialismo democr¨¢tico suscita la adhesi¨®n del pueblo y podemos cambiar el curso de la construcci¨®n europea". Jospin pidi¨® la creaci¨®n de un continente "m¨¢s cercano, m¨¢s creador, m¨¢s humano". El pol¨ªtico socialista dio muestras enseguida de que conoc¨ªa el terreno que pisaba, por lo que pareci¨® conveniente decir que es mucho m¨¢s lo que une a los socialistas europeos que lo que les separa. No puso pa?os calientes al describir la Europa que ¨¦l percibe. A su juicio, el "empobrecimiento es creciente".
Proclamas nacionalistas
Fruto del signo cambiante de los tiempos, se escuch¨® al franc¨¦s Lionel Jospin formular algunas proclamas nacionalistas que bien podr¨ªan haber sido pronunciadas por la ex premier brit¨¢nica Margaret Thatcher. "Europa no puede adaptar respuestas a las aspiraciones de los distintos pa¨ªses, por lo que muchos problemas hay que solucionarlos en el marco nacional, que sigue siendo el lugar fundamental de la democracia".El discurso fue seguido con atenci¨®n por Blair y Gonz¨¢lez, sentados uno junto al otro en primera fila. Gonz¨¢lez encaj¨® con buen gesto las diatribas que se lanzaron sobre el proceso hacia la moneda ¨²nica, que ¨¦l contribuy¨® a poner en marcha en Maastricht en 1991. De los gobernantes socialistas que firmaron el tratado, tan s¨®lo queda ¨¦l. "Aqu¨ª soy el dinosaurio"1- dijo Gonz¨¢lez con sorna. En su soledad le acompa?aba Jacques Delors, presidente de la Comisi¨®n Europea en la etapa Maastricht. Delors particip¨® ayer junto al l¨ªder del SPD, Oskar La-fontaine y Massimo D'Alema, secretario general del PDS.
Gonz¨¢lez se mostr¨® de acuerdo en que hay que hacer cambios y comprensivo con el fondo y la forma de los discursos de Blair y Jospin. Ahora bien, de inmediato le sali¨® su paternidad en el tratado que puso en marcha el camino hacia la Uni¨®n Econ¨®mica y Monetaria e hizo votos porque se respeten los plazos. Conf¨ªa en que, adem¨¢s de Suecia, ning¨²n otro pa¨ªs se descuelgue del objetivo de estar en la moneda ¨²nica. "Si se incumple el tratado, el horizonte de futuro para recuperar la moneda ¨²nica se convierte en totalmente incierto".
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