Dublin¨¦s, con dos hijas y separado

Bartholemew Patrick Ahern, el que a falta de sorpresas de ¨²ltima hora se convertir¨¢ el 26 de junio en el nuevo Taoiseacho primer ministro irland¨¦s, es el rostro progresista del Fianna F¨¢il. Ahem, de 45 a?os, ministro de Finanzas en el Gobierno presidido por el antiguo l¨ªder de su partido, Albert Reyno1ds, entre enero de 1993 y diciembre de 1994, cuando el despegue de la econom¨ªa irlandesa fue m¨¢s aparente, pasa por ser adem¨¢s un hombre conciliador y de talante dialogante.El dato m¨¢s relevante sobre su persona es el de su an¨®mala situaci¨®n civil. Separado de su mujer, Miriam, tras 20 a?os de matrimonio y dos hijas, Ahern mantiene una relaci¨®n estable con una secretaria de su partido, Celia Larkin, que normalmente le acompa?a a los actos oficiales y sociales. Cuando en un programa de televisi¨®n hace seis a?os, Ahern tuvo el valor de reconocer su situaci¨®n y abogar por una enmienda en la Constituci¨®n que permitiera a los irlandeses divorciarse, parte de la sociedad de Dubl¨ªn se rasg¨® las vestiduras. Sin embargo, los cambios en la conservadora sociedad irlandesa estaban ya en marcha y un posterior refer¨¦ndum dio el benepl¨¢cito al cambio constitucional.

Ahem asumi¨® la direcci¨®n del Fianna F¨¢il, el partido republicano y tradicionalista que mantiene estrechos lazos con la Iglesia cat¨®lica irlandesa, tras la ruptura de la coalici¨®n de gobierno con los laboristas a finales de 1994. Su antecesor, Albert Reynolds, el hombre que, seg¨²n algunas fuentes, contribuy¨® decisivamente a conseguir el alto el fuego del IRA en septiembre de 1994, cometi¨® el error de intentar proteger de la justicia a un sacerdote cat¨®lico acusado de varios delitos de abusos sexuales. Al contrario que Reyno1ds, famoso por su incontinencia verbal, es discreto y moderado.

Su coalici¨®n con los Dem¨®cratas Progresistas de Mary Harney fue calificada como un mero "matrimonio de conveniencia" por la oposici¨®n debido al talante derechista de Harney. Sin embargo, a la luz de la derrota de este partido nada ser¨ªa de extra?ar que Bertie Ahern cambiara nuevamente de pareja, esta vez en la esfera pol¨ªtica.