La absoluci¨®n
TODAS LAS decisiones judiciales han de respetarse, pero algunas dejan un poso de insatisfacci¨®n dif¨ªcil de evitar. Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz-Mateos y cuatro ex directivos de Rumasa resultaron absueltos ayer por la Audiencia Nacional de la acusaci¨®n de dos delitos de falsedad documental cometidos en las cuentas de la compa?¨ªa. Esta sentencia absolutoria cierra la cadena de procesos judiciales del caso Rumasa, expropiada en 1983 por el Estado para evitar su quiebra y el peligro de una crisis en el sistema financiero espa?ol. La sentencia de la Audiencia en nada cuestiona la legalidad de la expropiaci¨®n decidida por el primer Gobierno socialista, cuya constitucionalidad est¨¢ avalada por la sentencia del Tribunal Constitucional de diciembre de 1986; tampoco desmiente la necesidad de la intervenci¨®n estatal, justificada y respaldada por las auditor¨ªas e informes econ¨®micos independientes que analizaron la catastr¨®fica situaci¨®n financiera del holding de la abeja.La absoluci¨®n es una triste victoria para Ruiz-Mateos, sus directivos y los numerosos alborotadores callejeros y medi¨¢ticos que han aplaudido sus artima?as durante m¨¢s de catorce a?os. La sentencia considera probado que las p¨¦rdidas de los bancos adquiridos por Rumasa "trataban de encubrirse mediante unos asientos contables en unas subcuentas llamadas de avisados, en que se anotaban unos efectos inexistentes pendientes de cobro"; que se inventaron "unas fingidas cuentas de cr¨¦dito en las que se har¨ªan figurar como deudoras empresas importantes", y que Rumasa ten¨ªa, adem¨¢s de la contabilidad oficial, otra "contabilidad privada, interna e informal, para dar a conocer la real situaci¨®n financiera a los socios". El enga?o a los depositantes y a las autoridades financieras eran, como puede apreciarse, las normas probadas de conducta en Rumasa. Si, a pesar de tales hechos probados, la Audiencia ha absuelto a Ruiz-Mateos es porque en su opini¨®n las numerosas falsificaciones y la doble contabilidad no supusieron "lesi¨®n efectiva ni peligro de da?o econ¨®mico para los fingidos deudores", ni se origin¨® Iesi¨®n patrimonial". Ruiz-Mateos se ha beneficiado por otra parte, en este juicio, de la despenalizaci¨®n de la falsedad documental cometida por Rumasa y sus empresas, en virtud de la cual se comet¨ªan errores intencionados en los impresos de declaraci¨®n a la Seguridad Social.
La modificaci¨®n de algunas normas jur¨ªdicas y, sobre todo, la limitaci¨®n de delitos por los que pod¨ªa ser juzgado, impuesta por la justicia alemana para conceder su extradici¨®n, han beneficiado a Ruiz-Mateos y otros acusados. Gracias a tales condiciones, el primero s¨®lo ha podido ser juzgado en Espa?a por dos delitos menores respecto a las acusaciones de fondo sobre su gesti¨®n en Rumasa. A pesar de tales ventajas, Ruiz-Mateos no ha ahorrado insultos a los jueces y otras instituciones del pa¨ªs, agresiones vejatorias, amenazas mafiosas y triqui?uelas legales para retrasar los juicios y burlar y burlarse de la acci¨®n de la justicia. Ruiz-Mateos ha sido absuelto y nada hay que oponer a tal decisi¨®n; pero sus tropel¨ªas y payasadas han quedado bien a la vista para los ciudadanos.
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