Jospin promete luchar por la Europa social
El primer ministro franc¨¦s, Lionel Jospin, present¨® ayer ante la Asamblea Nacional el programa de su Gobierno. Y mantuvo hasta la ¨²ltima coma, aunque sin decir c¨®mo iba a financiarlas, las promesas electorales: reducci¨®n de la jornada laboral de 39 a 35 horas semanales, creaci¨®n de 350.000 empleos p¨²blicos, moralizaci¨®n de la vida pol¨ªtica y reorientaci¨®n de la construcci¨®n europea. Jospin admiti¨® que el compromiso sobre empleo arrancado por Francia en la cumbre de Amsterdam, era insuficiente, pero anunci¨® que perseverar¨¢.Su Gobierno desea el euro en los plazos revistos, dijo, y trabajar¨¢ por un reforzamiento de la uni¨®n, siempre que ¨¦sta est¨¦ al servicio de los ciudadanos.
Lionel Jospin no hab¨ªa puesto los pies en el hemiciclo de la Asamblea Nacional desde que, en 1992, perdi¨® su cargo ministerial y abandon¨® temporalmente la actividad pol¨ªtica. Ayer volvi¨® con aplomo y seguridad en s¨ª mismo, convertido en un primer ministro casi todopoderoso por la postraci¨®n en que la derrota electoral sumi¨® tanto al presidente conservador, Jacques Chirac, como a los partidos de la derecha. Los diputados aprobaron su discurso de investidura con 297 votos a favor y 252 en contra.Jospin, l¨ªder de una coalici¨®n de toda la izquierda (socialistas, comunistas, ecologistas, radicales y republicanos anti-Maastricht), trat¨® de complacer a unos y a otros :anunci¨® el desmantelamiento del car¨ªsimo superreactor nuclear Superph¨¦nix y cancel¨® el fara¨®nico proyecto de canal entre el Rin y el R¨®dano, para los Verdes; anunci¨® la abrogaci¨®n de las leyes Pasqua y Debr¨¦ contra la inmigraci¨®n ' para los movimientos juveniles y los sin papeles, y subi¨® un 4% el salario m¨ªnimo, para comunistas y sindicatos, que, sin embargo, consideraron insuficiente el aumento.
Aunque reivindic¨® su "derecho al error" y pidi¨® que el grado de cumplimiento de sus promesas fuera evaluado en cinco a?os, cuando concluya la legislatura, Jospin pudo constatar que se enfrentaba a grandes impaciencias y que los compromisos europeos limitaban su margen de maniobra. Un diputado comunista vot¨® contra la investidura por considerar que la firma del Pacto de Estabilidad en la Uni¨®n Europea hac¨ªa imposible desarrollar en Francia una pol¨ªtica de izquierda.
Contradicci¨®n b¨¢sica
El discurso de Lionel Jospin encerr¨® una contradicci¨®n b¨¢sica, que la oposici¨®n se apresur¨® a se?alar. Entre los compromisos asumidos por el primer ministro, la mayor¨ªa requer¨ªan un incremento del gasto p¨²blico: creaci¨®n de empleo por la v¨ªa presupuestaria, adici¨®n de 35.000 agentes a la las fuerzas de polic¨ªa, rehabilitaci¨®n de un mill¨®n de viviendas desfavorecidas, incentivos fiscales a la reducci¨®n de la jornada laboral y a las peque?as empresas, incremento de las dotaciones a las escuelas de los barrios m¨¢s violentos, mayores subvenciones a la escolarizaci¨®n y a la familia, y un largo etc¨¦tera. Pero, a la vez, Jospin se comprometi¨® a respetar los acuerdos europeos; es decir, a reducir el d¨¦ficit presupuestario para acceder al euro y a cumplir el Pacto de Estabilidad.Jospin ha encargado una auditor¨ªa sobre la situaci¨®n de las finanzas p¨²blicas y s¨®lo concretar¨¢ su programa legislativo sobre todo en lo econ¨®mico, cuando disponga, a mediados de julio, de las cuentas exactas Se sabe ya que los ingresos fiscales son inferiores a lo previsto y que, por tanto, el d¨¦ficit presupuestario, estimado oficialmente en un 3,5%, puede ser en realidad algo m¨¢s alto. ?Qu¨¦ har¨¢ el l¨ªder socialista para cuadrar las cuentas? Ayer sugiri¨® que acabar¨ªa con los ', privilegios" de las rentas m¨¢s altas Pero aumentar los impuestos sobre una parte de la poblaci¨®n no ser¨¢ suficiente para acercarse a los criterios de Maastricht, dado que descart¨® las medidas que el anterior Gobierno de Alain Jupp¨¦ hab¨ªa previsto, como privatizaciones y recorte del funcionariado.
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