Un partido sin objetivos

En la NBA, se denominan minutos de la basura. En el f¨²tbol son partidos sin nombre que s¨®lo sirven para elucubrar sobre las esencias del juego. Real Sociedad y Logro?¨¦s libraban ayer esa particular cuesti¨®n de personalidad. Los equipos se quejan de la presi¨®n cuando los puntos son el aval de alg¨²n objetivo. Cuando ya no hay objetivo los futbolistas echan en falta la presi¨®n, la tensi¨®n, la necesidad y cuantos aditivos hacen del f¨²tbol un espect¨¢culo.En su busca, Irureta y Aymar, dos t¨¦cnicos que se desped¨ªan, dispusieron una tropa de meritorios que garantizase un ¨¢pice de ilusi¨®n: unos porque se presentaban en sociedad, otros porque se han pasado med¨ªa temporada en el banquillo o en la grada y se les supone hambre de competici¨®n.

Con todos esos elementos el partido tuvo un comienzo trepidante, con un Logro?¨¦s que porfiaba en busca del gol. Y lo hall¨® de forma excelente, en una lecci¨®n de contragolpe al primer toque culminada por un portentoso Kelly.

La Real Sociedad a¨²n celebraba los aspectos emotivos cuando se encontr¨® con el gol y la actitud altanera de su oponente. Se desperez¨® y en la primera excursi¨®n por la banda el Logro?¨¦s le mostr¨® todas sus carencias en un bal¨®n cruzado que no atajaron seis defensores incluido su joven guardameta. Antes de la media hora la Real Sociedad hab¨ªa dado el vuelco al marcador.

La segunda mitad fue un culto a la cantera. Uno y otro equipos rindieron un tributo a la juventud que es algo que en los partidos intrascendentes tranquiliza siempre a la parroquia. Todo era a cambio del partido, limitado ya a las correr¨ªas de unos y otros, llenas de fe pero carentes de sentido. Daba igual. El f¨²tbol hab¨ªa cedido su lugar a los homenajes y a los bautismos. Lo que comenz¨® como un proyecto de buen f¨²tbol concluy¨® con un pu?ado de proyectos de futbolistas disfrutando por vez primera de la Liga de las estrellas.