La polic¨ªa admite que Otegi no aparece

La polic¨ªa aut¨®noma vasca y el delegado del Gobierno en Euskadi confirmaron ayer que no encuentran a Mikel Otegi. Le han perdido el rastro, y todo indica que ha huido para eludir la acci¨®n de la justicia. El autor confeso de las muertes de dos ertzainas en Itsasondo (Guip¨²zcoa) no se present¨® en el juzgado de Tolosa, incumpliendo as¨ª la medida cautelar dictada la v¨ªspera por el Tribunal Superior de Justicia del Pa¨ªs Vasco ante el temor de que huyese al extranjero, ya que tiene pendiente un nuevo juicio con jurado popular por el homicidio de I?aki Mend¨¹uze y Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez Villanueva, a quienes mat¨® con una escopeta de caza. El alto tribunal tambi¨¦n hab¨ªa ordenado que se le retiraran el pasaporte y el documento de identidad. Sin embargo, la Ertzaintza, que act¨²a como polic¨ªa judicial, no ha podido localizarle tras dos d¨ªas de intensa b¨²squeda.

El juzgado de Tolosa, donde Otegi ten¨ªa que haberse presentado ayer, cerr¨® sus puertas poco antes de las dos de la tarde sin que el acusado, en libertad provisional, apareciese. Era su segundo plant¨®n consecutivo a la justicia. La reciente revocaci¨®n del veredicto del jurado popular, que lo absolvi¨® del delito de asesinato por apreciar en ¨¦l enajenaci¨®n transitoria, levant¨® desde el primer momento la sospecha de que Otegi, de 24 a?os y simpatizante de Herri Batasuna, iba a huir. El TSJPV ha ordenado que se repita el juicio, y el pr¨®ximo lunes deber¨ªa pronunciarse, con Otegi presente, sobre si mientras tanto el acusado reingresaba o no en la c¨¢rcel.

Miedo

El miedo le ha podido. La polic¨ªa est¨¢ convencida de que Otegi se ha fugado ante la posibilidad de que en ese segundo juicio el veredicto se le volviera en su contra. La voz de alarma la dio Jos¨¦ Antonio Palacio, el abogado de la acusaci¨®n particular que representa a las familias de los ertzainas muertos, quien el viernes pasado, al anular el TSJPV el fallo absolutorio, se apresur¨® a pedir su ingreso en prisi¨®n de forma preventiva. "Otegi estuvo en la c¨¢rcel de Martutene durante 15 meses antes del primer juicio y ahora se encuentra en la misma situaci¨®n que entonces, es decir, acusado de dos delitos de asesinato". ?ste fue el argumento esgrimido por Palacio para pedir su encarcelamiento, y sobre ¨¦l iba a pronunciarse ma?ana el TSJPV.Vi¨¦ndolas venir, la propia sala que preside el magistrado Manuel Zorrilla impuso el viernes una serie de medidas cautelares a Otegi, despu¨¦s de que el jueves faltase a su cita ante el alto tribunal. Se le dejaba en libertad provisional, pero sin carn¨¦ de identidad ni pasaporte, y se le ordenaba comparecer tres d¨ªas a la semana en el juzgado de Tolosa porque "la previsi¨®n del riesgo de fuga del acusado no es un atisbo descabellado ni arbitrario". Ayer ten¨ªa su primera cita en Tolosa. Ni acudi¨® ni sus abogados justificaron la ausencia.

"Parece que ahora que se le est¨¢ buscando no se le encuentra", confirm¨® el delegado del Gobierno en el Pa¨ªs Vasco, Enrique Villar. Otegi fue visto por ¨²ltima vez el martes en el juzgado al que ayer no acudi¨®, cuando recogi¨® la citaci¨®n que le emplazaba a personarse en el TSJPV al d¨ªa siguiente.

La vista de aquel d¨ªa, en la que se iba a resolver si ten¨ªa que volver a la situaci¨®n de prisi¨®n provisional mientras no se celebrase el nuevo juicio, qued¨® suspendida por su incomparecencia. Su letrado, Miguel Castells, adujo que el acusado no se encontraba en condiciones psicof¨ªsicas, pero garantiz¨® que no iba a fugarse.

Falt¨® a su palabra. Desde entonces no se ha vuelto a saber nada de Otegi y los escasos movimientos registrados en su domicilio particular en los ¨²ltimas d¨ªas hacen prever lo peor; que haya podido salir de Espa?a. En el caser¨ªo de Itsasondo, donde la familia Otegi adem¨¢s del domicilio dispone de una planta para la elaboraci¨®n de sidra, no ha habido en los dos ¨²ltimos d¨ªas luces ni actividad alguna que permitiera deducir que alguien se encontraba dentro.

En distintos c¨ªrculos pol¨ªticos y jur¨ªdicos se admite, sin ninguna duda, que Otegi ha huido, aunque se coincide en admitir que legalmente la polic¨ªa no pod¨ªa adoptar hasta el viernes pasado medidas para intentar impedirlo. Otegi, simpatizante de la organizaci¨®n juvenil abertzale Jarra?, era un ciudadano libre hasta que hace s¨®lo dos d¨ªas el TSJPV acord¨® retirarle el pasaporte. Enrique Villar record¨® ayer que Otegi fue absuelto tras un juicio, por lo que "te¨®ricamente no pod¨ªa haber medidas precautorias" contra ¨¦l. Sin embargo, reconoci¨® que "quiz¨¢s se podr¨ªa haber establecido una vigilancia a distancia o algo". "Yo no soy jurista y no puedo entrar en, esa valoraci¨®n", precis¨®. El consejero vasco de Justicia, Ram¨®n J¨¢uregui, tambi¨¦n opina que poco cabe achacar a la Ertzaintza, que no ha podido intervenir en esta cuesti¨®n. En todo caso, el enigma sobre Otegi se resolver¨¢ definitivamente en la vista anunciada para ma?ana. Otegi est¨¢ acusado de matar a los agentes de la polic¨ªa aut¨®noma I?aki Mendiluze y Jos¨¦ Luis Gonz¨¢lez Villanueva el 10 de diciembre de 1995 en su domicilio familiar en Itsasondo (Guip¨²zcoa). Efectu¨® dos disparos con su escopeta de caza, caus¨¢ndoles la muerte de forma instant¨¢nea. El acusado estuvo en la c¨¢rcel donostiarra de Martutene durante 15 meses a la espera de que se le juzgara. A finales de febrero de este a?o se enfrent¨® a solicitudes de penas que superaban los 58 a?os de prisi¨®n. Sin embargo, el jurado popular -integrado por ocho mujeres y un hombre- le absolvi¨® al considerar que "no era en absoluto due?o de sus actos" cuando mat¨® a los dos agentes.

El jurado hizo suyo en el veredicto el testimonio ¨ªntegro de Otegi y la tesis de la defensa, en el sentido de que sufri¨® enajenaci¨®n mental transitoria y actu¨® movido por los efectos del alcohol. Algunos calificaron esta decisi¨®n como el "veredicto del miedo" de un jurado que se mantuvo inactivo e impasible ante las pruebas y acontecimientos que se desarrollaron durante la vista oral.Las ocho mujeres y el hombre que integraban el tribunal pidieron que durante la lectura del veredicto no hubiese ertzainas en la sala. Se fueron por la puerta de atr¨¢s. Algunos testigos afirman que dos jurados lloraban en el momento de emitir el veredicto. Esta misma semana, el TSJPV declar¨® nulo el juicio porque el jurado no se pronunci¨® sobre ninguna de las numerosas pruebas contra Otegi y se invent¨® la circunstancia de enajenaci¨®n transitoria.