JUICIO PROMOCIONAL

Andr¨¦s Calamaro, el m¨²sico argentino afincado en Madrid, volvi¨® recientemente a su pa¨ªs, dispuesto a promocionar Alta suciedad, su primer disco como solista tras la separaci¨®n de Los Rodr¨ªguez. Al poco de llegar, estaba en las primeras p¨¢ginas de los peri¨®dicos, pero por motivos judiciales: la Corte Federal ha reactivado un proceso contra ¨¦l, anteriormente sobreseido, por "apolog¨ªa del consumo de drogas". La acusaci¨®n se refiere a un concierto de Los Rodr¨ªguez en La Plata all¨¢ por 1994, un acontecimiento multitudinario y tenso que Calamaro intent¨® relajar mediante una inocente sugerencia: "Linda noche para fumarse un porrito". El cantante no se toma a broma el juicio, que podr¨ªa terminar con una multa y una condena de entre dos y seis a?os. Pero su casa discogr¨¢fica argentina ha comprobado que el embrollo ha sido buena promoci¨®n: Alta suciedad ha llegado r¨¢pidamente al n¨²mero uno y lleva despachadas m¨¢s de 100.000 copias-