Estalla un artefacto en el Meli¨¢ de La Habana

Un artefacto explosivo de escasa potencia estall¨® ayer a las 7.05, hora local (13.05 peninsular), en el vest¨ªbulo del hotel Meli¨¢ Cohiba de La Habana, que administra desde 1994 el grupo espa?ol Sol-Meli¨¢. La explosi¨®n no caus¨® heridos y s¨®lo algunos '"peque?os da?os materiales" seg¨²n un comunicado del grupo hotelero. Ni siquiera rompi¨® cristales ni despert¨® a los turistas que a esa hora estaban en las habitaciones. "Fue bulla (ruido), s¨®lo bulla", dijo el presidente de la corporaci¨®n tur¨ªstica cubana Cubanacan, Juan Jos¨¦ Vega, despu¨¦s de visitar por la ma?ana el edificio.

Vega asegur¨® al salir del hotel, al que no se permiti¨® acceder a la prensa extranjera, que no hab¨ªa heridos y que el hecho no hab¨ªa tenido mayor importancia. Seg¨²n la cadena, en el Cohiba, de 462 habitaciones, reinaba la normalidad y se encontraba casi totalmente ocupado.Roberto Koppens, un hu¨¦sped holand¨¦s, asegur¨® que ¨¦l no escuch¨® la explosi¨®n pero que s¨ª vio humo, polvo y algunas plantas en el suelo al bajar a la recepci¨®n minutos despu¨¦s del incidente. "Yo ni me despert¨¦", asegur¨® el barcelon¨¦s Salvador Villamar, de 33 a?os, quien lleg¨® el domingo. Villamar afirm¨® que cuando fue a desayunar no percibi¨® ninguna situaci¨®n anormal, y que, al salir, s¨®lo le extra?¨® que algunos empleados estuviesen tapando una zona del vest¨ªbulo con una especie de paneles de madera. En ese momento hab¨ªa 160 espa?oles hospedados.

Desde horas tempranas de la ma?ana del lunes, agentes de seguridad del hotel bloquearon el acceso al vest¨ªbulo a todo aquel que no fuese hu¨¦sped, mientras, dentro, varios empleados trabajaban tras unos parabanes (planchas de madera) instalados en la parte derecha de la recepci¨®n, donde se produjo la explosi¨®n. Por lo que se pod¨ªa apreciar desde fuera, donde tambi¨¦n fueron puestos unos tablones para tapar los ventanales, los da?os eran m¨ªnimos. No hab¨ªa cristales rotos. "Parece que fue un petardito debajo de un butac¨®n o en una planta", dijo un cubano que pudo conversar con algunos agentes de polic¨ªa.

Ning¨²n funcionario de la cadena tur¨ªstica espa?ola Sol-Meli¨¢ confirm¨® que la explosi¨®n fuese provocada por un explosivo. Fuentes del hotel aseguraron que "en estos momentos se investiga las causas de la explosi¨®n". Tampoco las autoridades cubanas han ofrecido una versi¨®n oficial.

El 12 de abril, a las cuatro de la madrugada, se produjo otra explosi¨®n en la discoteca Ach¨¦ del Meli¨¢ Cohiba, que fue atribuida oficialmente al estallido de "una tuber¨ªa de gas", aunque, seg¨²n diversas fuentes diplom¨¢ticas y algunos empleados del hotel, la causa real fue un peque?o artefacto explosivo colocado en los ba?os. En aquella ocasi¨®n no hubo heridos y los da?os fueron leves.

No es el primer caso

Las mismas fuentes dijeron que el 1 de mayo fue encontrado otro peque?o "petardo" en una jardinera del piso l5? del Meli¨¢ Cohiba, pero ¨¦ste no hizo explosi¨®n. Tras estos incidentes, que se manejaron con la m¨¢xima discreci¨®n, las autoridades redoblaron las medidas de seguridad en diversos hoteles de la capital y Varadero. A pesar de ello, el 12 de julio estallaron dos peque?as bombas en los hoteles Capri y Nacional de La Habana, provocando tres heridos y da?os leves.Las bombas explosionaron en la recepci¨®n de ambos hoteles, situados a menos de 200 metros el uno del otro, con un intervalo de 10 minutos. Tras el suceso, el Ministerio del Interior de Cuba asegur¨® tener "evidencias de que los responsables de los hechos, as¨ª como los materiales utilizados", proced¨ªan de Estados Unidos.

Diversos funcionarios cubanos se?alaron despu¨¦s que los autores de los atentados terroristas probablemente ten¨ªan vinculaciones con los grupos m¨¢s violentos y extremistas del exilio anticastrista de Miami, y que su prop¨®sito ¨²ltimo era espantar el turismo y da?ar la segunda industria del pa¨ªs.

El ministro de las Fuerzas Armadas, Ra¨²l Castro, asegur¨® adem¨¢s que ya hab¨ªa algunas personas detenidas vinculadas con anteriores atentados frustrados y responsabiliz¨® impl¨ªcitamente a EE UU por permitir que los "grupos terroristas" del exilio se entrenasen en su pa¨ªs y preparasen desde all¨ª sus acciones contra Cuba. En 1992 y 1994, comandos anticastristas infiltrados en lanchas r¨¢pidas tirotearon desde el mar el hotel Sol Palmeras, en Varadero, y otro, con administraci¨®n espa?ola, en Cayo Coco.

Tras los atentados de julio en el Nacional y el Capri, se han producido diversos avisos de bombas en hoteles, cabar¨¦s, l¨ªneas a¨¦reas y diversos centros tur¨ªsticos de La Habana, que resultaron ser falsos.

En Cuba el grupo Meli¨¢ administra 7 hoteles con 5.000 plazas. Otro hotel se construye en estos momentos en la capital con su participaci¨®n.