M¨¢s de 800 inmigrantes ilegales africanos se hacinan en Melilla a la espera de cruzar el Estrecho

Son m¨¢s de 800 los inmigrantes ilegales subsaharianos y argelinos que esperan en Melilla su oportunidad para llegar a la Pen¨ªnsula, en condiciones "por debajo de la dignidad humana", seg¨²n denuncian diversas Organizaciones No Gubernamentales: falta agua, comida, camas... Y son demasiados. La Delegaci¨®n del Gobierno reconoce que las condiciones "no son ¨®ptimas" pero afirma que se trabaja para mejorarlas. Una de las medidas para conseguirlo ser¨¢ un nuevo Centro de Acogida Temporal, que se pondr¨¢ en marcha en noviembre. Su capacidad: 300 personas.

Han llegado a Melilla de forma ilegal, cruzando la alambrada que trata de impermeabilizar los nueve kil¨®metros y medio de frontera, cuya vigilancia ha sido reforzada. A pesar de la alambrada, las c¨¢maras de v¨ªdeo, las pistas de sensores y los agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado, han logrado colarse. Ahora, esperan a que se les conceda el asilo o a que se deniegue el tr¨¢mite de su solicitud. Son m¨¢s de 800, entre subsaharianos y argelinos y la Asociaci¨®n Pro Derechos Humanos (APDH) ha denunciado que su situaci¨®n est¨¢ "por debajo de la dignidad humana".La APDH asegura que los inmigrantes subsaharianos, procedentes principalmente de Nigeria, Mali y Costa de Marfil y acogidos en el centro La Granja, "duermen a la intemperie, cuentan con una sola comida al d¨ªa y disponen de unos servicios m¨¦dicos totalmente insuficientes". El representante de la organizaci¨®n en Melilla, Pepe Alonso, critic¨® ayer tambi¨¦n el trato que reciben los argelinos, a los que asegura que las autoridades quieren "esconder" durante la Semana N¨¢utica que se celebrara con motivo del V Centenario de la fundaci¨®n espa?ola de la ciudad.

Las denuncias de esta organizaci¨®n se perciben como "injustas" en la Delegaci¨®n del Gobierno en Melilla, donde se reconoce, sin embargo, que las condiciones "no son ¨®ptimas". Pero se a?ade: "Se les trata bien. Si el trato fuera vejatorio e infrahumano, a lo mejor ven¨ªan menos".

Tambi¨¦n niega las denuncias otra organizaci¨®n que trabaja con los inmigrantes, Cruz Roja -encargada de distribuir las tres comidas diarias elaboradas por el tercio de la legi¨®n y que corren a cargo del Imserso, antiguo Inserso-, donde se asegura que las 500 raciones que se distribuyen actualmente para los m¨¢s de 800 inmigrantes son suficientes. "Si no, no se explica que despu¨¦s se tire comida que sobra". Apuntan tambi¨¦n un problema a?adido de los argelinos: "Son musulmanes y no se f¨ªan de la comida".

"Precariedad absoluta"

Pero las cr¨ªticas sobre la situaci¨®n de los inmigrantes en la ciudad espa?ola en el norte de ?frica no llegan s¨®lo desde APDH. Un grupo de otra Organizaci¨®n No Gubernamental (ONG), M¨¦dicos del Mundo, visit¨® hace varias semanas la ciudad para realizar "un estudio de campo" y elaborar un informe sobre las condiciones de vida de los inmigrantes. Javier ?lvarez, pediatra en el Hospital comarcal de V¨¦lez-M¨¢laga y coordinador de la organizaci¨®n en M¨¢laga, afirm¨® que los doscolectivos -subsaharianos y argelinos- viven en la "precariedad absoluta y carecen de las m¨¢s elementales condiciones de higiene, alimentaci¨®n y salubridad".?lvarez asegura que en La Granja hay agua corriente pero no potable y que en el centro Lucas Lorenzo, donde viven actualmente cerca de 100 argelinos, s¨®lo se dispone de agua durante tres horas y media. El representante de M¨¦dicos del Mundo critica la ausencia de asistencia m¨¦dica y de un control epidemiol¨®gico y aboga por integrar a los inmigrantes en el sistema sanitario p¨²blico.

La presencia de los inmigrantes en Melilla no es una situaci¨®n nueva. Se acentu¨® especialmente a partir de 1991. Y no parece que vaya a desaparecer. Uno de los principales problemas -adem¨¢s del que supone la falta de una pol¨ªtica migratoria clara del Gobierno espa?ol y de la Uni¨®n Europea, criticada por las ONG y reconocida por algunas autoridades- es que son demasiados inmigrantes para los medios actuales de la ciudad.

Las ONG apuestan por la documentaci¨®n de los ilegales sin cupos restrictivos y con un an¨¢lisis individual e inmediato de su situaci¨®n, una recomendaci¨®n que tambi¨¦n ha hecho p¨²blica el Defensor del Pueblo.

Para el delegado del Gobierno, Enrique Beamud, que sabe que la inmigraci¨®n en Melilla es un fen¨®meno con el que hay y habr¨¢ que vivir, la soluci¨®n pasa por conseguir estabilizar el n¨²mero de inmigrantes subsaharianos, consiguiendo que la mayor¨ªa de ellos puedan ser integrados en los programas de acogida que el Gobierno mantiene con diversas ONG con los que se consigue la entrada en la Pen¨ªnsula. Y mientras se logra este objetivo, intentar mejorar sus condiciones.

Con esta finalidad se va a construir en Melilla, en un solar cercano al puesto fronterizo de Farhana, un nuevo Centro de Acogida Temporal (CAT) "en condiciones". Est¨¢ previsto que se ponga en marcha en noviembre.

Representantes de la Delegaci¨®n del Gobierno, Imserso, Cruz Roja, Insalud y otras organizaciones que tomaron el relevo al Ayuntamiento de la ciudad aut¨®noma en la organizaci¨®n de los inmigrantes han mantenido ya las primeras reuniones para plasmar un proyecto que cuenta con un presupuesto inicial de 100 millones de pesetas. En el nuevo centro se instalar¨¢ una oficina de atenci¨®n a los extranjeros y se organizar¨¢n programas de acogida y ayuda al empleo para los inmigrantes.

La capacidad del CAT, fijada en un m¨¢ximo de 300 personas, parece ser el ¨²nico problema. Porque aunque se cumplan los deseos de Beamud y se estabilice el n¨²mero en noviembre, el flujo de inmigraci¨®n es creciente, o como lo describe ?lvarez, "entran m¨¢s de los que salen".