"No soy un monstruo. Mi pueblo me quiere"

Tiene 52 a?os. Cuida su presencia al m¨¢ximo. Bien peinado y afeitado. Traje gris. Preferentemente cruzado. Se declara un "nacionalista muy moderado" y niega toda responsabilidad en el inicio de la guerra o en los desmanes de los primeros meses ("no tuve ninguna capacidad de mando"). Pese a verse cada vez m¨¢s cercado mantiene su tono desafiante intacto.Pregunta. El Tribunal de La Haya le busca como criminal de guerra. ?Cree que le van a detener dentro de poco?

Respuesta. Me cuesta creer que alguien quiera realmente verme en La Haya. Yo les fastidio m¨¢s a ellos que ellos a m¨ª.

P. Entonces ?para qu¨¦ son las numerosas armas que hemos visto en el camino desde la puerta hasta aqu¨ª?

R. Nadie conoce realmente las intenciones de los norteamericanos. Pero est¨¢ claro que no quieren hablar conmigo sobre mis guardaespaldas.

P. Usted ha dicho que en realidad no desean capturarle, ?por qu¨¦ deber¨ªa tenerle miedo el Tribunal de La Haya?

R. Porque no voy a desempe?ar el papel de acusado, sino el de acusador. Me atacan con imputaciones falsas. La gente que no sabe absolutamente nada de m¨ª se comporta como si yo fuera un monstruo. No soy ning¨²n monstruo. Soy escritor. Soy un buen psiquiatra. Mi pueblo me quiere.

P. En los acuerdos de Dayton, la ayuda econ¨®mica a los serbios de Bosnia est¨¢ sujeta a que las autoridades serbobosnias cooperen con el Tribunal, sin condiciones previas.

R. No tenemos ninguna garant¨ªa de que la Rep¨²blica Srpska [entidad serbia de Bosnia-Herzegovina] fuese a conseguir nada si MIadic y yo compareci¨¦ramos en La Haya. Yo no conf¨ªo en los pol¨ªticos occidentales.

P. ?Qu¨¦ har¨¢ la gente si usted es detenido?

R. Es algo que no puedo prever. Los serbios est¨¢n muy furiosos por la parcialidad de la, comunidad internacional. Han intentado sabotear nuestra campa?a electoral, han amenazado con detenciones violentas, mi familia es acosada y mi nieto Neboska [que en serbocroata significa no temas] tiene miedo de los helic¨®pteros que sobrevuelan mi casa.

P. Para la opini¨®n p¨²blica no es un abuelo afectuoso, sino un criminal de guerra.

R. Nosotros no empezamos esta guerra.

P. Ya al principio de la guerra, en el verano de 1992, puso a todo el mundo en su contra cuando se recibieron las primeras noticias sobre campos de tortura en Bosnia.

R. Durante los seis primeros meses de la guerra, no tuve ninguna capacidad de mando. Hasta el 12 de mayo de 1992 no fui elegido para la presidencia de la Rep¨²blica Srpska. Ese mismo d¨ªa, encargamos al general MIadic la organizaci¨®n del Ej¨¦rcito. El 20 de mayo entr¨® en acci¨®n, pero ya el 13 de mayo di la orden de que hab¨ªa que respetar los derechos humanos y otras convenciones.

P. El peri¨®dico estadounidense Newsday y la cadena de noticias brit¨¢nica ITN informaron en agosto de 1992 de la existencia d¨¦ campos de concentraci¨®n de Bosnia.

R. Eso eran mentiras. Ten¨ªamos muchos prisioneros de guerra. Nuestro pueblo ten¨ªa que retenerlos en alg¨²n sitio.

P. ?Niega que en Omarska y en otros campos se asesinase y se torturase a la gente?

R. No puedo descartar casos aislados de venganza.

P. Ese mismo verano tuvo lugar la matanza en una cola del pan en Sarajevo. Murieron 14 civiles. El atentado supuso el embargo contra Serbia.

R. Los imparciales saben que fueron los musulmanes...

P. ?Se puede probar eso?

R. Algunas personas de Washington guardan las pruebas bajo llave...

P. En La Haya se le acusa de haber utilizado francotiradores, que mataron a muchos civiles. ?Es todo mentira?

R. ?Sabe cu¨¢ntos serbios han sido asesinados? No quiero descartar la posibilidad de que algunos serbios respondiesen a los disparos.

P. Debido a las matanzas de Srebenica, el Tribunal ha presentado una acusaci¨®n separada contra usted y contra Ratko Mladic.

R. ?C¨®mo sabe que fueron asesinadas muchas personas?

P. ?Entonces no hubo ninguna matanza?

R. En absoluto. Es una de las historias que los musulmanes fabricaron y los medios de comunicaci¨®n compraron.

Suddeutsche Zeitung / EL PA?S