El PP renuncia a su exigencia de que los partidos puedan recibir donaciones an¨®nimas
Las posiciones irreconciliables entre el PP y el PSOE sobre la reforma de la ley de financiaci¨®n de partidos pol¨ªticos empiezan a flexibilizarse. Los socialistas consideran escandaloso" que el PP defienda las donaciones an¨®nimas, en tanto que los populares estiman rid¨ªculo el rechazo del PSOE que las empresas puedan aportar dinero. Los primeros ofrecen ahora levantar la opacidad de las donaciones si el PSOE acepta el dinero d¨¦ personas jur¨ªdicas. El tope m¨¢ximo ser¨ªa de 15 millones por persona particular o jur¨ªdica. Los donantes tendr¨ªan desgravaci¨®n fiscal.
Una ponencia parlamentaria unificar¨¢ en septiembre las seis propuestas que existen para poder sacar adelante una proposici¨®n de ley de consenso sin que intervenga el Gobierno. El grueso de la financiaci¨®n, no obstante, saldr¨¢ de los Presupuestos Generales del Estado.El secretario general del PSOE, Joaqu¨ªn Almunia, tiene mucho inter¨¦s en afrontar de inmediato la reforma de la ley de financiaci¨®n de partidos pol¨ªticos. As¨ª se lo comunic¨® al presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, en su reuni¨®n del mes de julio y lo mismo hizo ante el secretario general de Converg¨¨ncia Democr¨¢tica de Catalunya, Pere Esteve. Mientras tanto, representantes de los grupos parlamentarios del PP y del PSOE han ido discutiendo sin publicidad sobre la reforma, y el acercamiento ha sido importante.
PP, PSOE, IU, CiU, Coalici¨®n Canaria y PNV han presentado en el Congreso sus respectivas propuestas de reforma. Jaime Ignacio del Burgo, por los populares; Francisco Fern¨¢ndez Marug¨¢n, del PSOE; Manuel Silva, de CiU; Jox¨¦ Joan Gonz¨¢lez de Txabarri, del PNV; Felipe Alcaraz, de Izquierda Unida, y Luis Mardones, de Coalici¨®n Canaria, son los responsables de encontrar un texto com¨²n.
Los borradores sobre una nueva ley de financiaci¨®n se han ido amontonando a lo largo de estos a?os sin que, al final, haya habido mucho inter¨¦s por reformar la ley de 1987, muy elogiada aunque no contempla las aportaciones privadas. Los esc¨¢ndalos de financiaci¨®n ilegal abrieron el debate sobre la necesidad de llenar el vac¨ªo legal. Izquierda Unida y el Bloque Nacionalista Galego son las formaciones menos interesadas en este punto. La coalici¨®n que dirige Julio Anguita nunca ha encontrado motivos para creer que un tropel de particulares o empresarios vaya a dirigirse a las sedes de Izquierda Unida para dar donativos.
El ¨²ltimo borrador que el PP present¨® al PSOE rompi¨® las negociaciones por cuanto que el partido conservador defend¨ªa el anonimato de las donaciones. Los socialistas respondieron que de esa manera se "institucionalizaba" el fraude. Ellos, a su vez, se cerraban en banda a que los partidos pudieran recibir dinero de empresas. S¨®lo admit¨ªan de particulares. "Aqu¨ª se nota un cierto tufillo autoexculpatorio", exclam¨® Felipe Alcaraz, de IU, al conocer el motivo de la trifulca entre los dos grandes.
En septiembre las cosas pueden cambiar radicalmente. El PP est¨¢ dispuesto a renunciar al anonimato de los donantes si el PSOE admite que las empresas puedan dar dinero con las mismas limitaciones que las personas individuales. La propuesta del PP ser¨¢ de 15 millones como tope por persona y a?o. Los socialistas son inicialmente proclives al intercambio de cesiones. Todos est¨¢n de acuerdo en que haya desgravaci¨®n fiscal.
Ni los nacionalistas catalanes de CiU ni los vascos del IPNV han tenido nunca problema alguno en defender a las claras la financiaci¨®n privada. El peneuvista Gonz¨¢lez de Txabarri fue en el Congreso muy claro cuando present¨® su propia propuesta: "La reforma debe fomentar iniciativas para estimular la financiaci¨®n privada con cautelas pero con valent¨ªa". Continu¨®: "Debe terminar la etapa en la cual los partidos se han empe?ado en hacerse trampas al solitario, con financiaci¨®n bajo cuerda, acompa?ada de discursos ampulosos pero con una situaci¨®n bajo la mesa dif¨ªcilmente soportable".
Constructores, abstenerse
No todos los empresarios podr¨¢n dar dinero a los partidos pol¨ªticos. El reciente pasado hace imp¨²dico aceptar donativos de sectores que se han visto caracterizados por dar o ser objeto de solicitud del diezmo. Por tanto, la ley prohibir¨¢ ex presamente a las constructoras, a los contratistas de obras, a los promotores de viviendas y a las concesionarias de limpieza, entre otros, que, muestren su simpat¨ªa hacia uno u otro partido con dinero.Los partidos, sin embargo, son conscientes de que la apertura a la financiaci¨®n privada no va a ser su panacea. Est¨¢ por ver la reacci¨®n de las empresas y particulares cuando se abra la ventanilla. La legislaci¨®n actual permite la entrega de un mill¨®n de pesetas anual de particulares y la realidad muestra que las aportaciones son excepcionales.
El PSOE, aquejado por el caso Filesa, inici¨® una etapa de ajuste con Francisco Fern¨¢ndez Marug¨¢n, cuya gesti¨®n ha sido alabada en su partido por reducir a la mitad en tres a?os una deuda de 11.000 millones. Los trabajadores de ese partido van para el cuarto a?o de congelaci¨®n salarial.
En el PP, sin embargo, aseguran que la situaci¨®n es casi confortable. El ponente de la ley' ' Jaime Ignacio del Burgo, afirma que el PP saldar¨¢ su -deuda el pr¨®ximo a?o y alaba el buen hacer del responsable de Finanzas, ?lvaro Lapuerta. Dice que la clave ha sido la " austeridad".
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