Atenas se sac¨® la espina del Centenario

El Comit¨¦ Ol¨ªmpico Intemacional (COI) le devolvi¨® a Atenas la deuda inmensa que contrajo en 1990 al preferir a Atlanta para organizar los Juegos del Centenario, en 1996. Esta vez no fue capaz de darle un nuevo disgusto y ayer le concedi¨® la organizaci¨®n de los Juegos del 2004. La cuentas se han saldado, pero tambi¨¦n la candidatura lo ha merecido, al rev¨¦s que hace siete a?os. El comit¨¦ organizador actual no tiene nada que ver con el de entonces y ya no exist¨ªan las razones tan evidentes que llevaron a los miembros del COI a dar una sonora bofetada a la tradici¨®n. Curiosamente, se ha repetido la historia, pero cambiando los papeles de protagonista. Atenas hizo esta vez de Atlanta y Roma, la gran derrotada, de Atenas. Por eso la ciudad que organiz¨® los primeros Juegos de 1896 se impuso por un abrumador 66-41 en la votaci¨®n final y repetir¨¢ como sede en la historia ol¨ªmpica 108 a?os despu¨¦s.Roma ha acusado ya el acuerdo que sali¨® en una reuni¨®n convocada la noche del jueves en el hotel Beau Rivage por Nelson Mandela (es decir, Ciudad del Cabo) con miembros surafricanos, griegos e hispanoamericanos para repartir los votos de las ciudades que quedaran eliminadas (tambi¨¦n Buenos Aires), lo que termin¨® favoreciendo a Atenas.

Lo ocurrido ayer en el Palacio de Beaulieu donde en 1986 fue elegida Barcelona para 1992, ha tenido un primer mensaje claro: el COI, lo mismo que entonces, despu¨¦s de Los Angeles 84 y Se¨²l 88, quer¨ªa volver a Europa tras las escalas en Atlanta 96 y Sydney 2000. Y no se ha atrevido a¨²n a dar oportunidades a territorios v¨ªrgenes en el olimpismo como Suram¨¦rica o Africa. Y en segundo lugar ha sido un varapalo a una candidatura como la romana, que durante los largos meses de campa?a se hab¨ªa puesto claramente en cabeza casi al final, superando a la ateniense, pero que se ha pasado de prepotente y ha cometido graves errores en las ¨²ltimas semanas. Por ejemplo, Atenas organiz¨® en los primeros d¨ªas de agosto unos dignos Campeonatos del Mundo de atletismo, pero recibi¨® unos ataques desmesurados del italiano y presidente de la Federaci¨®n Internacional, Primo Nebiolo, tambi¨¦n miembro de COI. A la hora de echar las culpas, Roma tendr¨ªa que mirar m¨¢s a este personaje que se cree con un poder absoluto y no mide el alcance diplom¨¢tico de sus actos.

La capital griega fue en cabeza desde el principio de las votaciones y gan¨® la primera con 32 votos, por 23 de Roma, 20 de Estocolmo y 16 de Buenos Aires y Ciudad del Cabo, que tuvieron as¨ª que desempatar para decidir la primera aspirante eliminada. Buenos Aires cay¨® por 44-62. En la segunda ronda de votaciones Atenas subi¨® a 38, Roma a 28 Ciudad del Cabo a 22 y Estocolmo, que baj¨® a 19, se qued¨® fuera. Es ah¨ª donde la acusaci¨®n de Roma pierde sentido, porque la gran subida ateniense fue en la cuarta votaci¨®n, hasta 52 votos por 35 de la capital italiana y 20 (dos menos, incluso) de Ciudad del Cabo, que se descolg¨® as¨ª de la carrera y dej¨® un mano a mano europeo que parec¨ªa cantado. Ello signific¨® que fueron los votos descartados de la candidatura sueca los que se dirigieron en mayor¨ªa (el doble) para destacar a Atenas. Y Estocolmo no estaba en ninguna conspiraci¨®n. Lo ¨²nico que se anunciaba es la preferencia de los miembros del COI por castigar a Nebiolo y el final de 66-41 fue sorprendente especialmente por lo amplio de margen. Pero que lo explique Nebiolo.

Atenas empez¨® la carrera ol¨ªmpica del 2004, la m¨¢s encarnizada (por numerosa), de la historia, como clara favorita. La deuda que el olimpismo moderno ten¨ªa con su cuna parec¨ªa una garant¨ªa enorme a poco que el comit¨¦ organizador se esmerase. Y a fe que lo ha hecho aprendiendo de los errores del pasado. De la mano de una presidenta inteligente y atractiva, Gianna Angelopoulos-Daskalaki, esposa del naviero Theodor Angelopoulos, se acab¨® la prepotencia por la tradici¨®n y el tremendo descontrol de protagonismos que asol¨® la candidatura para 1996. S¨®lo ha mandado ella y no un grupo. El triunfo de la humildad tendr¨¢ un jugoso premio, al garantiz¨¢rsele ya m¨¢s de la mitad de su presupuesto que ronda los 1.700 millones de d¨®lares. Con los contratos ya firmados de televisi¨®n y con patrocinios, sus ganancias son ya fijas de m¨¢s de 1.000 millones. El dracma mucho peor que la peseta y sus casi 160 por d¨®lar, ronda los 290 en estos momentos. La familia Angelopolos ha construido el barco de su vida en el astillero del lago Leman.