Francisco Cerezo, primer espa?ol por mandato

"Nada, soy el primer espa?ol por las circunstancias. Me mandaron atacar y tuve la suerte de que me saliera bienFrancisco Cerezo, un oscuro ciclista manchego (Tomelloso, 1971), no pierde la piel de modesto pese a que lleva varias etapas luciendo el maillot blanco de l¨ªder de la monta?a, pese a que est¨¢ s¨¦ptimo en la general, el primer espa?ol. ?l es un mandado. Est¨¢ en el ciclismo como podr¨ªa estar en cualquier otro oficio. Es un trabajador en un equipo de trabajadores. El Estepona Toscaf es un conjunto sin fantas¨ªas, heredero directo de aquel ciclismo espa?ol cuyos mejores hombres eran los que m¨¢s aguantaban escapados bajo el sol. No hay m¨¢s t¨¢ctica que la de intentar la escapada, dejarse ver y romper la carrera cuando ¨¦sta va morosa, aunque este a?o los de Maximino P¨¦rez y Jes¨²s Su¨¢rez Cuevas llegan con alguna aspiraci¨®n m¨¢s: seguir colocando al escalador Daniel Clavero entre los primeros de la general e intentar ganar alguna etapa con un sprinter ruso, Sergu¨¦i Smetanine.

A Francisco Cerezo le toc¨® la china de animar la primera etapa, la de los alrededores de Lisboa. Cuatro segundos de bonificaci¨®n en dos metas volantes y tres pasos en primera posici¨®n por puertos de tercera fueron el duradero bot¨ªn de su escapada con Canzonieri. "Nada, hice mi trabajo, buscar la escapada hasta que llegue. Como s¨¦ que no soy un hombre que pueda ganar, s¨¦ que ¨¦ste es mi trabajo. Y si lo s¨¦ y no lo hago, ya me dir¨¢s". Trabajador pero orgulloso. Cerezo hace sus cuantas. ?Cu¨¢ntos corredores aficionados no dar¨ªan algo para estar en su lugar? "Lo tomes como lo tomes en Espa?a s¨®lo hay 80 profesionales. Y yo soy uno de ellos".

Cerezo lo tiene claro desde que es profesional, desde 1993. Enseguida se olvidaron los sue?os de grandeza. "Cuando ves que no pasas a un equipo grande ya sabes lo que te espera. Y lo mejor es asimilarlo enseguida, adaptarte a tu profesi¨®n, darte cuenta de que ¨¦se es tu hueco". Trabajo y sacrificio, son sus ¨²nicos lemas. La recompensa del ¨¦xito, tan rara -en su palmar¨¦s s¨®lo figuran dos triunfos de etapa en dos carreras portuguesas-, ser¨ªa eso, una excepci¨®n. "Si alg¨²n d¨ªa triunfo en una escapada y si encima es en la Vuelta, eso ya ser¨ªa el colino". La felicidad total del currante.