"Orson WeIles era un genio, pero tambi¨¦n un gran maniaco depresivo", dice Ridley Scott

La cr¨ªtica le ha acusado durante toda su carrera de favorecer el esplendor visual sobre la narrativa. Incluso ahora, con G. I. Jane, el ¨²ltimo filme de Ridley Scott, hay quien menosprecia la musculatura conseguida por Demi Moore, la protagonista. "Lo que se ve en la pantalla es puro m¨²sculo, no es fotograf¨ªa. Gan¨® 10 kilos de m¨²sculo en tres meses. Cualquiera podr¨ªa hacerlo; me costar¨ªa siete meses, pero podr¨ªa hacerlo", dice convencido de que la preparaci¨®n f¨ªsica es fundamental para cualquier trabajo. "Cuanto mejor est¨¢s, mejor te funciona el cerebro".

"No es un problema de vanidad, es un problema de salud, de intelecto, de ganas de vivir. Orson Welles ser¨ªa un genio, pero tambi¨¦n era un. gran man¨ªaco depresivo", a?ade el director de Alien, Blade Runner o Thelma y Louise, algunas de las pel¨ªculas m¨¢s analizadas de los ¨²ltimos 20 a?os.A sus 59 a?os, y pese a las cr¨ªticas, este brit¨¢nico criado en Alemania se ha convertido en uno de los directores m¨¢s venerados de la cinematograf¨ªa contempor¨¢nea. Su ¨²ltimo estreno, G. I. Jane, cuenta la historia de una mujer dispuesta a formar parte del cuerpo especial de operaciones Navy SEAL, conocido como s¨®lo para hombres por la dureza de sus entrenamientos. Para Ridley Scott, se trata de una pel¨ªcula "feminista por definici¨®n. Es la carrera de una persona que, para poder llegar donde quiere, tiene que superar infinidad de problemas por el mero hecho de ser mujer", explica.

Para Scott tambi¨¦n es la historia de una persona marcada por una meta, y nadie mejor que Demi Moore para interpretar un papel tan determinado como ¨¦ste. "?Qui¨¦n si no?", pregunta, ofreci¨¦ndose su propia respuesta: "No estoy seguro de que alguna otra actriz hubiera sido capaz de interpretar el papel. ?Sharon [Stone]?: no. ?Sigourney Weaver?: demasiado mayor. ?Michelle Pfeiffer?: ni pensarlo. ?Jodie [Foster]?: tal vez, pero ten¨ªa otros compromisos. Demi era la ¨²nica opci¨®n".

En su opini¨®n, la fuerza de Demi Moore, conocida como una de las actrices mejor pagadas de Hollywood y tambi¨¦n como una de las m¨¢s exigentes, radica en su propia determinaci¨®n, su deseo de alcanzar cualquier meta.

Aire marcial

Ridley Scott ya pose¨ªa ese aire marcial que le precede antes de verse inmerso en temas militares para el rodaje de G. I. Jane. Hijo de un miembro de la Marina mercante reclutado durante la II Guerra Mundial, Scott se hubiera dejado llevar por su pasi¨®n militar de adolescente y se hubiera alistado en el Ej¨¦rcito de no haberlo impedido su padre. "Me dijo: 'De eso nada. La ¨²nica escuela en la que te vas a alistar es en la de arte", recuerda Scott.

El porte militar se lo debe a su espalda perennemente erguida, fruto de algunas luxaciones: "Nada en particular, muchas tonter¨ªas cometidas en el transcurso de muchos rodajes", explica sin darle mayor importancia y concentr¨¢ndose en mascar otra de sus se?as de identidad: ese cigarro puro que la legislaci¨®n antitabaco estadounidense le hace mantener apagado mientras se encuentre en un lugar p¨²blico en Los ?ngeles.

Tras estudiar en la Royal Academy of Arts por indicaci¨®n de su padre, Ridley Scott trabaj¨® como documentalista con D. A. Pennebaker y como dise?ador de producci¨®n en la BBC antes de fundar RSA, una de las casas de producci¨®n publicitaria m¨¢s importantes del mercado en activo desde hace 32 a?os. En el campo de la publicidad televisiva pronto se, alz¨® con la fama de director innovador, con un sentido muy particular de la iluminaci¨®n y del estilo que supo trasladar posteriormente al cine con su deb¨² en Los duelistas.

El filme fue recibido en Cannes hace 20 a?os entre los comentarios de que Scott favorec¨ªa en su obra el esplendor visual frente a la narrativa. Al cineasta tambi¨¦n le han seguido los fracasos de algunos de sus filmes, como Legend o 1492. Incluso su ¨²ltima pel¨ªcula, White Squall, no consigui¨® el respaldo comercial que esperaba. Sin que estas cr¨ªticas le quiten el sue?o, el realizador no quiere ocultar su deseo de triunfo. "La gente no sabe lo dif¨ªcil que es hacer una pel¨ªcula", afirma comparando su experiencia con la de un entrenamiento militar.

Tras varios a?os de letargo profesional, motivado principalmente por el fracaso de dos de sus proyectos que nunca llegaron a hacerse realidad (Crisis in the hot zone y Pancho Villa), Scott ha acelerado el curso lento de su carrera, con tan s¨®lo 10 pel¨ªculas en 20 a?os, y ha comenzado los preparativos de la que ser¨¢ su pr¨®xima cinta, basada en el libro de Richard Mathesson ,I'm legend y con Arnold Schwarzenegger como protagonista.

Ridley Scott tiene muchos m¨¢s planes. Junto con su hermano, el tambi¨¦n realizador Tony Scott, y con el que mantiene la productora Scott Free, Scott se ha convertido en jefe de los estudios Shepperton, localizados a 30 kil¨®metros de Londres, y que gracias a una inversi¨®n anual de 3,25 millones de d¨®lares (m¨¢s de 500 millones de pesetas) en mejoras se han convertido en el principal centro de rodaje en Europa. "Conozco esos estudios como la palma de mi mano. Llevo trabajando en ellos desde hace 25 a?os. Alien naci¨® all¨ª", recuerda con cierta emoci¨®n.