Philippe Rosillon, militante de la francofon¨ªa y la latinidad
Philippe Rosillon, que fue, en 1966, a iniciativa del presidente De Gaulle, el primer relator general del Alto Com¨ªsariado para la defensa y la expansi¨®n de la lengua francesa, y que realiz¨® misiones pol¨ªticas delicadas para el fundador de la V Rep¨²blica, falleci¨® el pasado 6 de septiembre en Cormeilles, en la regi¨®n parisiense. Ten¨ªa, 66 a?os y acababa de abandonar el secretariado general de la Uni¨®n Latina, organizaci¨®n intergubernamental que agrupa a 84 Estados de lengua rom¨¢nica, que animaba desde 1983. Ahora se preparaba para abrir en Par¨ªs una oficina priva-da centrada en la promoci¨®n de la francofon¨ªa.
Fue enterrado en su pueblo de Beynac-et-Cazenac (Perigord), del que fue alcalde de 1965 a 1984. Presidente de las comunas ribere?as de la Dordo?a, instal¨® con ¨¦xito a unas 200 familias portuguesas en la comarca.
Procedente de la Escuela Nacional de Administraci¨®n (ENA), administrador civil en el Ministerio de Finanzas, jefe de servicio de la cooperaci¨®n en el Ministerio de Asuntos Exteriores de 1974 a 1976, Philippe Rosillon fue adem¨¢s toda su vida un militante infatigable -y desinteresado hasta el punto de financiar algunas operaciones con su propio dinero- de la francofon¨ªa y, con la misma conviccion, de la latinidad. En Mil millones de latinos en el a?o 2000 (1983) expone c¨®mo el conjunto ling¨¹¨ªstico latin¨®fono (700 millones de hablantes, de los cuales 125 franc¨®fonos) podr¨¢, si se organiza, impedir la hegemon¨ªa de la americano-anglofon¨ªa (500 millones de hablantes). En 1985, fund¨® en.
Par¨ªs el cine Latina y, en 1992, Radio-Latina.
Sin embargo, fue sirviendo la causa del franc¨¦s en Canad¨¢ cuando el joven Rosillon conoci¨® su hora de gloria, en 1968, cuando el primer ministro canadiense Elliot Pierre Trudeau, en persona, le acus¨® p¨²blicamente de ser "un agente m¨¢s o menos secreto" de Francia, que actuaba de una manera "clandestina y subrepticia" en Canad¨¢.
Durante los cinco anos precedentes, este alto funcionario hab¨ªa realizado realmente, con el aval de De Gaulle, varias misiones, si no secretas, al menos discretas, entre los franc¨®fonos canadienses, en particular en Manitoba. El asunto Rosillon aliment¨® a¨²n m¨¢s la cr¨®nica ya pasablemente agitada de las relaciones entre Par¨ªs y Otawa, ya que el acusado replic¨® a Trudeau: "Soy un funcionario que ha militado por los derechos de las minor¨ªas franc¨®fonas, pero las ¨®rdenes de mi misi¨®n ven¨ªan de Matignon (residencia del primer ministro)". Seg¨²n se cuenta, sus armas prefe-
ridas en sus misiones eran las canciones de Jaeques Brel y los tebeos de Ast¨¦rix... En cualquier caso, como consecuencia, durante un lustro Philippe Rosillon no pudo volver al pa¨ªs de Maria Chapdelaine.
Su primera experiencia de militantismo activo la hab¨ªa tenido antes en el marco de Patria y Progreso, c¨ªrculo que ¨¦l cofund¨® en 1958 para reagrupar a los hombres de izquierda, gaullistas o socialistas, partidarios de la Argelia francesa, de una gran Francargelia. Despu¨¦s de la independencia de ese pa¨ªs, en 1962, varios miembros de Patria y Progreso se interesaron por el nacionalismo quebequ¨¦s y el unionismo val¨®n profranc¨¦s, dos temas por los que De Gaulle se interesaba.
Adem¨¢s de un Atlas de la lengua francesa (1995) muy preciso, Rosillon es autor, entre otras obras, de Sobrevivir a De Gaulle (en colaboraci¨®n con Jacques Gagliardi) y De Gaulle y las patrias- JEAN-PIERRE P?RONCELHUGOZ (Le Monde)
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.