"M¨²sica y espiritualidad forman un matrimonio"
James Taylor (Boston, 1948) es uno de los grandes cantautores norteamericanos. La experiencia ac¨²stica y directa de la m¨²sica es su caballo de batalla y as¨ª lo demostr¨® el mi¨¦rcoles ante un peque?o auditorio en Madrid. "Es la forma en que me gusta hacer la m¨²sica y escucharla tambi¨¦n", explica Taylor. "Me interesa la conexi¨®n esencial e ¨ªntima que proviene de la tradici¨®n de la m¨²sica folk. Sigo pensando en m¨ª como un m¨²sico folk, tambi¨¦n un m¨²sico pop, pero b¨¢sicamente una voz y una guitarra. Ha sido interesante venir a Espa?a y actuar sin otro acompa?amiento que mi guitarra, hac¨ªa a?os que no lo hac¨ªa".De voz pausada y actitud serena, James Taylor parece la personificaci¨®n de la timidez, pero ¨¦l lo desmiente. "No soy extrovertido, ni me impongo ante los dem¨¢s", admite. "Sin embargo, s¨¦ que tengo una fuerza de voluntad muy poderosa y una tendencia clara a expresarme y hasta promocionarme. Pero tengo sentimientos encontrados al respecto. Soy m¨¢s vacilante que t¨ªmido", asegura.
Algunos de sus temas son autobiogr¨¢ficos, quiz¨¢ una estrategia de autoenga?o. "Es cierto, en mis canciones suele haber un contexto melanc¨®lico en lo musical con una letra m¨¢s bien gozosa. Y tambi¨¦n lo opuesto, una m¨²sica alegre con una letra quiz¨¢ triste".
El t¨ªtulo de su nuevo ¨¢lbum es Hourglass (reloj de arena). "Un reloj de arena permite ver y coger entre las manos la exacta medida de una hora", dice. "Mientras la arena cae ves cu¨¢nto tiempo ha pasado, cu¨¢nto queda por delante y esa estrecha cintura por la que caen los granitos, que es el presente. Es un artefacto interesante y simb¨®lico. Es tambi¨¦n como un disco compacto en el que cabe una hora de m¨²sica, en ¨¦l entran cerca de cinco a diez a?os de trabajo".
Pasado, presente y futuro
Pasado y presente parecen darse la mano ahora. De alguna forma hay un paralelismo entre los a?os noventa y los setenta, cuando ¨¦l se dio a conocer. "Encuentro un gran contenido espiritual en las canciones de ahora", reflexiona. "La m¨²sica siempre ha sido espiritual, hubo ¨¦pocas en las que ¨¦sta s¨®lo se escuchaba en las iglesias. Yo crec¨ª con el gospel sure?o, blanco y negro, y siempre ha sido una fuente de inspiraci¨®n para m¨ª. Este disco tiene varias canciones que yo considero espirituales, como Up er mei, Up from your life, Another day, Enough to be on your way... Son temas compuestos para llenar una necesidad interior. El hecho de ser agn¨®stico no quita que yo tenga un fuerte lado espiritual. La m¨²sica y la espiritualidad forman un matrimonio".La era de las tecnolog¨ªas parece ser uno de los ogros de Taylor, algo que le atrae y repele a la vez. "Es una necesidad inevitable en un mundo que depende de la informaci¨®n. Hay cosas de la comunicaci¨®n global que son muy excitantes como la posibilidad de coordinar al instante la actividad humana para mantener la salud del planeta, justo cuando m¨¢s se necesita. Eso es crucial para m¨ª. Pero, al mismo tiempo, cuando veo desarrollarse una monocultura global, en la que dominan las pel¨ªculas de Schwarzenegger y los discos de las Spice Girls, pienso que es lamentable que se borre la individualidad".
A lo largo de su carrera, muchos m¨²sicos han hecho versiones de los temas de James Taylor, desde Elvis Presley hasta Ray Charles, Emmylou Harris o los Isley Brothers. Sin embargo, los mayores ¨¦xitos comerciales de este m¨²sico han sido sus versiones de temas ajenos, de Carole King (You-ve got a friend) o Marvin Gaye (How sweet it is), entre otros. "Es cierto, no entiendo bien por qu¨¦ es as¨ª. Para m¨ª escribir una canci¨®n y escucharla son cosas muy parecidas. El proceso de escribir una canci¨®n es para m¨ª algo incontrolado y misterioso. Es el mejor sentimiento que tengo. Interpretar temas de otros es parecido. Pero me siento mejor con temas m¨ªos como The frozen man, Is enough to be on your way u Only a dream in Rio que con las grabaciones que tengo de Handy man, Up on the roof o How sweet it is. Aunque acepto que son m¨¢s accesibles".
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