Clinton inicia en Caracas una gira para subir al tren de la privatizaci¨®n
ENVIADO ESPECIAL El presidente estadounidense, Bill Clinton, lleg¨® ayer a la leal Venezuela, primer abastecedor de petr¨®leo de Estados Unidos a¨²n en circustancias hist¨®ricas comprometidas, en el arranque de una gira de seis d¨ªas, primera de su presidencia por Am¨¦rica del Sur, que contin¨²a en Brasil y Argentina y cuyo principal objetivo es abrir nuevos mercados y evitar que la Uni¨®n Europea y otros competidores cierren el paso a las inversiones y exportaciones norteamericanas en una regi¨®n de grandes posibilidades econ¨®micas e inmersa en un ambicioso programa de privatizaciones. "En el siglo XXI las Am¨¦ricas ser¨¢n un modelo para el mundo con democracia y mercados abiertos", declar¨® a su llegada al aeropuerto La Carlota de Caracas. El presidente destac¨® la hist¨®rica amistad con Venezuela, pa¨ªs con el que comparte, dijo, "la democracia, el desarrollo energ¨¦tico, la m¨²sica y el b¨¦isbol".
Sin sobresaltos, apenas algunos graffitis en los campus -"Clinton sal de la tierra de Bol¨ªvar", o "de Col¨®n a Clinton la misma invasi¨®n"-, Bill Clinton, aterriz¨® en Caracas con directores de compa?¨ªas petroleras y un nutrido equipo de ministros, asesores en la lucha contra el narcotr¨¢fico, relaciones exteriores o legales o medio ambiente. Se aloj¨® en una suite con jacuzzi del Hilton, a 1.300 d¨®lares la noche (200.000 pesetas), y su presencia no despert¨® entre los seis millones de caraque?os, la mitad en los cerros de chabolas, el inter¨¦s de los viajes presidenciales anteriores: John Fitzgerald Kennedy, (1961), James Carter (1978) y George Bush (1990). Tampoco la pasi¨®n suscitada por el vicepresidente Richard Nixon, que arrib¨® durante la efervescencia revolucionaria de 1958, y fue escupido y abucheado de tal manera que el Pent¨¢gono despach¨® al mar Caribe una flotilla para advertir de que con el imperio no se juega, ni menos se le agrede a tomatazos.Libre comercio
Clinton, que tratar¨¢ de lograr la contribuci¨®n de Venezuela en la promoci¨®n del ?rea de Libre Comercio de las Am¨¦ricas (ALCA) para el a?o 2005, dedicar¨¢ un d¨ªa al pa¨ªs que generosamente bombe¨® crudo para paliar las necesidades del Norte durante la Il Guerra Mundial, a?os en que cargueros en ruta hacia puertos norteamericanos eran hundidos por submarinos alemanes en el Caribe, y tambi¨¦n en 1968, cuando tras negar su apoyo al boicoteo petrolero de las naciones ¨¢rabes tras su conflicto con Israel aument¨® al m¨¢ximo su producci¨®n para aliviar la escasez de EE UU y Europa.
La polit¨®loga Mar¨ªa Teresa Romero atribuye el poco entusiasmo dispensado a la visita al. hecho de que en principio no estaba prevista en los planes de la Casa Blanca, y "fue el resultado de un lobby venezolano de ¨²ltima hora". "Tambi¨¦n podr¨ªa explicarse", agrega "por la relativa estabilidad pol¨ªtica y econ¨®mica de Venezuela y el bajo perfil del actual Gobierno con Washington".
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