Catalu?a reduce su vinculaci¨®n al Consejo de Universidades
Albaig¨¦s lamenta la falta de di¨¢logo con el ministerio
Catalu?a ha iniciado un t¨ªmido pero efectivo distanciamiento del sistema universitario estatal. Desde el inicio de este curso, el Comisionado para Universidades de la Generalitat dejar¨¢ de pedir al Consejo de Universidades todos aquellos informes que no sean vinculantes que signifiquen una mera comprobaci¨®n de la normativa b¨¢sica, y prescindir¨¢ tambi¨¦n de esta instituci¨®n en las, iniciativas que deban canalizarse a trav¨¦s de ella, con tal que haya consenso entre los rectores catalanes. "Informaremos s¨®lo a efectos de coordinaci¨®n general", asegura Joan Albaig¨¦s, comisionado para Universidades.Albaig¨¦s reconoce que la Ley de Reforma Universitaria (LRU) de 1983, elaborada antes de las transferencias, ofrece un margen de maniobra muy reducido a las comunidades aut¨®nomas, porque "lo regula casi todo, desde los planes de estudio hasta la creaci¨®n de centros, adscripci¨®n, capacidades y homologaci¨®n. Incluso para cerrar un expediente a un administrativo hay que pasar por Madrid". Pero a?ade: "Jugaremos muy fuerte en el vaciado de competencias del Consejo de Universidades, que debe quedar como ¨®rgano de debate y orientaci¨®n de la pol¨ªtica universitaria general".
Albaig¨¦s considera que las relaciones con el Ministerio de Educaci¨®n pasan por momentos bajos. "Se ha ido demasiado lejos al romper los puentes de di¨¢logo", asegura, y lamenta el discurso universitario en clave espa?ola que induce a confusi¨®n, ya que, en su opini¨®n, "el sistema espa?ol no lis homog¨¦neo, hay diferencias notables. Cada comunidad deber¨ªa tener autonom¨ªa para tomar las medidas que considerase necesarias. Y, sin embargo, el ministerio hace planteamientos que tienden al uniformismo total".
El Comisionado crear¨¢ dos comisiones de trabajo, una sobre la cuesti¨®n del profesorado y otra sobre los planes de estudio, y espera tener propuestas concretas antes de tres meses. "Si no lo arregla el ministerio, lo arreglaremos nosotros", dice Albaig¨¦s. Estos deseos pasan por la reforma del plan de estudios, que en su opini¨®n es f¨¢cil de realizar si hay voluntad pol¨ªtica. "Si se lleva a cabo, esto nos determinar¨¢ la carga docente necesaria, lo que nos permitir¨¢ abordar la cuesti¨®n del profesorado sabiendo qu¨¦ plantilla se necesita", explica.
La Generalitat se propone revisar la relaci¨®n entre la oferta y la demanda. "El a?o que viene quedar¨¢n plazas vacantes", asegura Albaig¨¦s, y no le va a temblar el pulso si considera que se debe dejar de financiar estudios sin demanda.
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