Palabras para Julia

Yo ten¨ªa una amiga. Se llamaba, simplemente, Julia, y a veces, cari?osamente, la llam¨¢bamos La Obrera. Esta mujer, un poco marcada por las huellas de la p¨¦rdida temprana de parte de su familia, hab¨ªa conseguido en los ¨²ltimos a?os crear la suya propia: ten¨ªa pareja, dos hermosos hijos y un trabajo.?Ah! Ese trabajo. Tambi¨¦n qu¨¦ mala suerte: empresa en conflicto, con amenazas de regulaci¨®n, de cierre, siempre con problemas.

Y ella, no teniendo m¨¢s gu¨ªa en su vida que su nobleza y su propia ¨¦tica, teniendo que renunciar a muchas de sus energ¨ªas y de ese tiempo precioso en el que disfrutaba tanto con sus hijos, decide estar en el comit¨¦ de empresa y, aun no estando muy convencida de la efectividad de los actos, se manifiesta, hace huelga, se encierra los jueves de cada semana y as¨ª durante bastante tiempo. Al final, la empresa hizo casi lo que quiso y el personal se fue a la calle. Ella se qued¨®, aunque por poco tiempo: la muerte se la llev¨®. S¨®lo ten¨ªa 44 a?os.

Creo que ahora, ya transcurrido un tiempo, esa empresa, con otro nombre, solicita 150 puestos de trabajo; los que estaban en litigio en ¨¦pocas pasadas eran 30 o 40.

Quiz¨¢ la muerte de mi amiga no tenga nada que ver con ese exceso de angustia, de conflictos y malas situaciones creadas en su trabajo, pero s¨ª puede ser que hayan acortado su vida.

Y es que lo fundamental en una comunidad es que haya trabajo para todos y que, aunque la comunidad somos las personas, una por una, con una vida y deseos propios, y el mantener y crear puestos de trabajo deber¨ªa ser lo primordial en una sociedad como la nuestra.

Y es que los pol¨ªticos, por la rentabilidad al 100% y en aras de no s¨¦ qu¨¦ "proyecto de futuro", est¨¢n haciendo que la vida, ¨²nica e irrepetible, de muchas personas se convierta en un peque?o infierno.

Y es que los que gobiernan, cada vez m¨¢s y m¨¢s, se apartan de lo que es la vida cotidiana de las personas que votamos.-