La fotograf¨ªa en color llega a la portada de "The New York Times"

Tony Fern¨¢ndez, el jugador hispano del equipo de b¨¦isbol de Cleveland, fue ayer el protagonista de la primera fotograf¨ªa en color jam¨¢s publicada en su primera p¨¢gina por The New York Times. El prestigioso peri¨®dico norteamericano vive inmerso en un profundo proceso de renovaci¨®n, de contenidos, dise?o y organizaci¨®n interna, al que no son ajenos otros grandes diarios de Estados Unidos ante la ca¨ªda de las ventas y la cada d¨ªa m¨¢s agresiva competencia de la televisi¨®n.

La primera del New York Times, al que ya no se le puede seguir llamando la Dama Gris, inclu¨ªa tambi¨¦n otra foto en color, la de la fiscal general Janet Reno compareciendo ante el Congreso. Un peque?o mapa del delta del Misisip¨ª ilustrando el principal reportaje del d¨ªa y la portadilla de un suplemento sobre autom¨®viles encabezando el sumario, eran los otros dos toques en color en portada.La incorporaci¨®n de la foto y la ilustraci¨®n en color al negro sobre blanco de los titulares y textos a?adi¨® una elegante vivacidad a la portada del diario m¨¢s prestigioso de EE UU y quiz¨¢ del mundo. El mes pasado, The New York Times comenz¨® a publicar fotos en color en sus p¨¢ginas interiores y anunci¨® que el proceso culminar¨ªa este mes con la primera.

Esa novedad no es la ¨²nica impulsada por el editor, Arthur Ochs SuIzberger Junior, y el director, Joseph Lelyveld. The New York Times vive una profunda renovaci¨®n, la m¨¢s importante desde finales de los a?os setenta, que se manifiesta en una ampliaci¨®n de las informaciones, secciones y suplementos relacionados con las artes, los deportes, las tendencias sociales y los estilos de vida. Tambi¨¦n est¨¢ potenciando lo relacionado con ordenadores personales e Internet.

Ochs Sulzberger Junior promueve asimismo un proceso de "humanizaci¨®n" de las relaciones internas en el diario, que incluye mayor di¨¢logo entre sus ¨¢reas empresariales, editoriales e informativas y est¨ªmulo de la cr¨ªtica y la autocr¨ªtica.

El peri¨®dico mantiene su voluntad de rigor y credibilidad, su desprecio por el sensacionalismo y su aristocr¨¢tica indiferencia por el modo en que otros medios cubren la informaci¨®n. Lelyveld acaba de declarar a la revista Time que, vista la reacci¨®n general a la muerte de la princesa Diana, ¨¦l cree que The New York Times deber¨ªa haberle dedicado menos importancia a la noticia.

Descenso de difusi¨®n

The New York Times no es el ¨²nico peri¨®dico norteamericano embarcado en una renovaci¨®n. El conjunto de la prensa escrita del pa¨ªs tiene, de. hecho, razones para hacerlo. Si la publicidad sube y el precio del papel baja, la difusi¨®n sigue descendiendo. Aunque este a?o se est¨¢ produciendo una cierta desaceleraci¨®n en relaci¨®n a los anteriores, los editores calculan que terminar¨¢ con una media nacional de un descenso del 2% en el n¨²mero de ejemplares vendidos. En el caso del New York Times, el tercer diario tras USA Today y The Wall Street Journal, los compradores se est¨¢n reduciendo en un 4,2% en la edici¨®n diaria y un 5,8% en la dominical.Cada cual tiene su f¨®rmula. USA Today, todo un ¨¦xito al ser el primer diario de difusi¨®n nacional, con color e historias cortas y claras, est¨¢ apostando por introducir periodismo de investigaci¨®n, ampliar los deportes y facilitar m¨¢s informaci¨®n econ¨®mica inteligible.

Peri¨®dicos locales en ascenso, como The Orange County Register (California), Newsday (Long Island, Nueva York), The Times Picayune (Nueva Orleans) y Saint Petersburg Times, se est¨¢n ganando una merecida reputaci¨®n por la calidad de sus investigaciones sobre esc¨¢ndalos locales y la amplitud de su informaci¨®n de servicios.

La f¨®rmula de Los Angeles Times es particular. El presidente de su empresa editora, Mark Willes, ha decidido aplicar una teor¨ªa revolucionaria: las secciones del peri¨®dico ser¨¢n independientes y funcionar¨¢n como unidades de negocio separadas con un objetivo com¨²n, la rentabilidad. Los responsables de cada secci¨®n deber¨¢n enfocar las informaciones. de forma que se capten nuevos lectores. Como ayuda, contar¨¢n con encuestas peri¨®dicas y detalladas que les informar¨¢n de lo que desean en cada secci¨®n del diario los compradores y suscriptores. El modelo ha causado honda preocupaci¨®n en la redacci¨®n del diario, por el peligro de que los objetivos econ¨®micos y publicitarios prevalezcan sobre los informativos. Pero esta inquietud no amilana a los gestores de la empresa, que quieren aumentar la difusi¨®n del peri¨®dico en un 50% desde el mill¨®n de ejemplares actual.

En cuanto a The Washington Post, la continuidad del blanco y negro, la mala calidad de, su papel y su impresi¨®n y la desorganizaci¨®n de sus paginas y cuadernos le est¨¢n convirtiendo en un anacronismo. El Post resiste gracias a su precio (25 centavos) y su creciente informaci¨®n local y de servicios. La familia Graham, no obstante, ha prometido una pronta renovaci¨®n.