Los argelinos eligen hoy a sus representantes locales en medio de acusaciones de fraude

Todos los partidos que concurren hoy a las primeras elecciones municipales y provinciales que Argelia celebra en siete a?os han aireado la acusaci¨®n de que se avecina un fraude en las urnas. Todos menos la Agrupaci¨®n Nacional Democr¨¢tica (RND), el partido del presidente Liam¨ªn Zerual, se preguntaban ayer d¨®nde iban a pasar la noche las 1.800 urnas itinerantes que han estado recorriendo desde el lunes centenares de aldeas y campamentos de n¨®madas. Muchos argelinos, sobre todo los que acuden cada d¨ªa con bidones a abastecerse de agua en las fuentes, se preguntan para qu¨¦ sirve votar en unos comicios cuyos resultados dicen conocer de antemano.

ENVIADO ESPECIAL

Las elecciones tienen lugar en medio de un clima de violencia marcado por las recientes matanzas de civiles y las operaciones militares en curso a. las mismas puertas de la capital, Argel.El vencedor de los comicios locales de junio de 1990, el Frente Isl¨¢mico de Salvaci¨®n (FIS), sigue proscrito desde hace m¨¢s de cinco a?os. Sus l¨ªderes en el exilio han dado la orden de boicotear las elecciones. Entre los votantes islamistas, esta consigna contribuir¨¢ a engrosar las filas de los abstencionistas en Argel y el centro del pa¨ªs. Sin embargo, gran n¨²mero de partidarios del FIS pueden dar su apoyo a Ennhada, el m¨¢s radical de los dos partidos islamistas legales y ampliamente implantado en el este de la atribulada naci¨®n norteafricana.

Son cerca de diecis¨¦is millones los votantes convocados hoy a elegir, mediante un sistema proporcional, a sus concejales, o miembros de las 1.500 asambleas comunales populares (ayuntamientos) o diputados provinciales, en las 48 asambleas populares de wilaya (provincia). Pero apenas seis de los 37 partidos en liza parecen tener probabilidades de superar el list¨®n del 7% de los sufragios y obtener resultados significativos en el conjunto de pa¨ªs, aunque s¨®lo dos de ello -el RND y el Frente de Liberaci¨®n Nacional (FLN, antiguo partido ¨²nico)- presentan candidatos en todas las circunscripciones.

Previsiblemente, ambas formaciones pol¨ªticas constituir¨¢n la mayor¨ªa en el nuevo Consejo Nacional (C¨¢mara alta), dos tercios de cuyos miembros ser¨¢n elegidos indirectamente por los representantes locales surgidos de los comicios de hoy.

Adem¨¢s, el presidente Zerual tiene el privilegio constitucional de asegurarse el control del Consejo Nacional, con poder de veto sobre la Asamblea Nacional Popular (C¨¢mara baja, elegida el pasado mes de junio), al designar directamente al resto de los senadores.

Los grupos de la oposici¨®n, a los que se sum¨® esta vez el FLN, concluyeron el pasado martes la campa?a con denuncias contra los preparativos del r¨¦gimen de Zerual para garantizare el control del poder local.Hay presidentes de mesas electorales analfabetos, desaparici¨®n. de papeletas de los colegios y, sobre todo, ausencia de control sobre las 1.800 urnas itinerantes que van de aldea en aldea en busca del voto de la poblaci¨®n rural m¨¢s diseminada, incluso en wilayas, densamente pobladas, como Blida, en el centro, y Skikda, en el este.

El Movimiento de la Sociedad por la Paz (MSP), del jeque Mahfud Nahna, sigue siendo el principal partido islamista reconocido por el r¨¦gimen argelino, con el que colabora de hecho con su presencia en dos carteras del actual Gobierno de coalici¨®n. Pero desde las presidenciales de 19951 en las que recibi¨® una cuarta parte de los sufragios, Nahna no ha hecho m¨¢s que perder peso electoral. En las legislativas de junio ya recibi¨® un castigo a su pol¨ªtica de equilibrista, a caballo entre el poder y la oposici¨®n, y el MSP cay¨® al 15% de los votos.

Protestas laicas

Pero las principales quejas contra las maquinaciones en las urnas proceden de las filas de la oposici¨®n laica, el Frente de Fuerzas Socialistas (FFS), de Ait Ahmed, partidario del di¨¢logo con el islamismo, y de la Agrupaci¨®n por la Cultura y la Democracia (RCD), del antiintegrista Said Sadi. Ambos se disputan, por otro lado, el voto en las principales zonas urbanas del centro del pa¨ªs y en la Cabilia, la regi¨®n con mayor¨ªa de poblaci¨®n bereber. Sadi no ha dudado en afirmar en el cierre de campa?a que "el fraude [electoral] es una costumbre del r¨¦gimen".Y mientras los pol¨ªticos legalizados disputan la batalla de las urnas, los ciudadanos de Argel parecen mirar hacia otro lado. Hacia el cercano bosque de Bainem, donde el Ej¨¦rcito se libra a la caza de un centenar de guerrilleros de los Grupos Isl¨¢micos Armados (GIA). Ese es precisamente el lugar al que las autoridades no permiten acudir a los periodistas extranjeros venidos a cubrir los comicios locales, y a quienes en cambio se muestra, semanas ya despu¨¦s de las matanzas, los m¨¢s sangrientos escenarios del horror en el tri¨¢ngulo de la muerte que rodea a la capital desde hace m¨¢s de un lustro.