Villeneuve se corona por KO

Lucha sin cuartel con resoluci¨®n dram¨¢tica. Jerez obsequi¨® al mundo con todo lo que la f¨®rmula 1 hab¨ªa anunciado. Jacques Villeneuve (Williams), de 26 a?os, conquist¨® su primer t¨ªtulo mundial en una carrera para recordar, grabar y repetir, despu¨¦s de sobrevivir a un choque con su rival, Michael Schumacher (Ferrari), en el que ¨¦ste qued¨® eliminado. Los dos candidatos llevaban 48 vueltas al l¨ªmite, queriendo quedar delante del otro para ser campe¨®n. El alem¨¢n mandaba, pero Villeneuve vio hueco para adelantar. Schumacher resisti¨® y los b¨®lidos se tocaron. El Ferrari se hundi¨® en la grava mientras el Williams conduc¨ªa a su due?o hacia la gloria. El piloto canadiense acab¨® renqueante, en tercera posici¨®n, y la victoria fue para el fin¨¦s Mika Hakkinen, (McLaren).Como se esperaba, el duelo por el t¨ªtulo mundial result¨® explosivo. Pas¨® lo que ten¨ªa que pasar. Tanta tensi¨®n y tanta emoci¨®n no merec¨ªan otro desenlace. La estrecha pelea que Schumacher y Villeneuve hab¨ªan mantenido durante los 15 grandes premios anteriores, aplazada hasta la ¨²ltima cita, se vivi¨® en toda su intensidad sobre el asfalto jerezano. Desde el momento del arranque se comprob¨® que no iban a arrugarse ni el canadiense aspirante a honrar la memoria de su padre ni el alem¨¢n candidato a tricampe¨®n.

Y as¨ª fue. Schumacher respondi¨® a lo que cuentan sus bi¨®grafos. Con sangre fr¨ªa, sali¨® mejor, pese a partir del lado malo de la parrilla. El Ferrari n¨²mero 5 se desliz¨® para cubrir en cabeza los primeros metros hasta la curva inaugural. Al Williams n¨²mero 3 le cost¨® desbocar sus 750 caballos. Resbalaron las ruedas ante tal aluvi¨®n de potencia y Villeneuve hizo los primeros giros en tercera posici¨®n, superado por su compa?ero Heinz Harald Frentzen. El otro n¨²mero dos, Eddie Irvine, arranc¨® s¨¦ptimo y nunca pudo intervenir en la lucha estelar.

Schumacher intent¨® aprovechar la situaci¨®n inicial. Imprimi¨® un ritmo fuerte para distanciarse, pero Villeneuve no baj¨® los brazos tras su deficiente puesta en acci¨®n. El canadiense tard¨® poco en avanzar a su amigo Frentzen -¨¦ste le facilit¨® la tarea- y se mantuvo a tiro de piedra del l¨ªder rojo. Los dos candidatos al t¨ªtulo rodaban cerca del l¨ªmite, se controlaban y presionaban. Nunca les separaron m¨¢s, de cinco segundos.

As¨ª discurri¨® el primer tercio de la carrera. Lleg¨® entonces el primer momento trascendental. Schumi entr¨® a repostar y sus mec¨¢nicos italianos obraron con meticulosidad prusiana para devolverle a la pista sin merma. Un par de minutos m¨¢s tarde, el trabajo fue para el taller de Williams, y los hombres de Villeneuve no fallaron esta vez. En la pista, la situaci¨®n de equilibrio se restableci¨® con un ingrediente nuevo: Frentzen, como l¨ªder, tapon¨® a Schumacher para que Villeneuve le atrapara.

El canadiense intent¨® superar al piloto de Ferrari, pero fracas¨® y la acertada estrategia de Williams pas¨® a mejor vida. Frentzen tuvo que entrar a repostar y Schumacher volvi¨® a heredar el liderato. Apret¨® de nuevo para distanciar a Villeneuve y pareci¨® que lo lograba aprovechando la presencia de doblados. Pero no, s¨®lo un cataclismo pod¨ªa desparejar a las dos estrellas.

Y despu¨¦s de otra parada en boxes, sin novedad, se lleg¨® a la decisiva vuelta 48 . Villeneuve vio la puerta abierta en la curva Dry Sack, propicia para adelantar. Meti¨® el morro, Schumacher lo advirti¨® e intent¨® cerrarle. Los coches se tocaron y el alem¨¢n acab¨® en la escapatoria de grava y no pudo continuar. Schumi debi¨® de recordar que si ninguno acababa el t¨ªtulo era suyo. Ejecut¨® una maniobra similar a la que le dio la primera corona, en 1994, ante Damon Hill, pero con resultado contrario.

All¨ª qued¨® enterrada la ilusi¨®n de tricampeonato del ¨ªdolo de Ferrari y tambi¨¦n el ansia de los seguidores del cavallino rampante, incluido el surafricano Jody Scheckter, presente en Jerez, que cre¨ªa que el suyo de 1979 iba a dejar de ser el ¨²ltimo t¨ªtulo de un piloto de Ferrari. Durante las vueltas que faltaban les qued¨® la peque?a esperanza de que el Williams de Villeneuve hubiera resultado da?ado. Incluso el canadiense temi¨® lo peor y tembl¨® en la ¨²ltima fase.

Lo tranquilizaron por radio y el nuevo campe¨®n se coron¨® despu¨¦s de aflojar dr¨¢sticamente el ritmo, circunstancia que aprovecharon los hombres de McLaren, Hakkinen y el escoc¨¦s David Coulthard, para conseguir la victoria y el doblete. Pero desde el tercer pelda?o del caj¨®n, Villeneuve pudo saborear el final de una temporada dif¨ªcil.