A ver

En el 98 te dol¨ªa Espa?a y lo comprend¨ªas todo. Ahora, para entender algo tienes que empezar notando una molestia en Hong Kong, y desde all¨ª sufrir un calambre que, tras cruzar Tokio y Wall Street, se manifiesta de s¨²bito en tu fondo de pensiones: igual que cuando crees que te duele la cabeza y resulta que es el eco de una enfermedad g¨¢strica. "Est¨¢ usted arruinado por culpa del ¨ªndice Hang Seng". "Pero si me hab¨ªan dicho que me hiciera un plan de pensiones privado porque la Seguridad Social iba a quebrar". "Su plan de pensiones es perfecto, pero se reflejan en ¨¦l los desastres de las Bolsas chinas. La econom¨ªa global es como el Cuerpo M¨ªstico: si alguien se pilla los dedos en Kazajist¨¢n, tenemos que arrancarle las u?as a usted en Valladolid. Y viceversa".Y mientras los ahorros de toda una vida desaparecen por los desag¨¹es de la banca de Hong Kong, territorio fant¨¢stico donde los haya, aqu¨ª seguimos discutiendo si en las asignaturas de Geograf¨ªa e Historia nos conformamos con que los chicos se sepan los afluentes del r¨ªo del pueblo, aunque est¨¦ seco, y reciten a los poetas locales, aunque sean malos, o nos aventuramos a ir un poco m¨¢s all¨¢ de nuestras narices. La decisi¨®n es complicada, pero si la tranquilidad de la vejez depende del clima financiero asi¨¢tico, tal vez deber¨ªamos ense?arles tambi¨¦n alg¨²n proverbio chino.

La Geograf¨ªa y la Historia sirven para situarse en el tiempo y en el espacio, pero la Econom¨ªa es importante para saber cu¨¢ntas veces puedes comer al d¨ªa. Lo duro es cuando las tres se asocian de este modo. Que supriman las cajas rurales o el ¨ªndice Dow Jones, porque con los dos s¨ªndromes juntos no se puede vivir, sobre todo si todav¨ªa tenemos que pasar el euro, que dicen que da fiebre.

A ver.