El diab¨¦tico m¨¢s laureado
El remero brit¨¢nico Steven Redgrave a¨²n aspirar¨¢ a su quinto t¨ªtulo ol¨ªmpico
Es uno de los m¨¢s grandes deportistas de todos los tiempos y la fatalidad ha querido que siga aspirando a aumentar su leyenda. El remero brit¨¢nico Steven Redgrave hizo historia al conseguir en los Juegos de Atlanta 96 su cuarto t¨ªtulo ol¨ªmpico. Este mismo a?o, a primeros de septiembre, mientras en Lausana (Suiza), Atenas ganaba la batalla por la sede del 2004, no muy lejos de all¨ª, en el campo de regatas de Aiguebelette, en la Saboya francesa, Redgrave obten¨ªa su s¨¦ptimo t¨ªtulo mundial. No pod¨ªa pedir m¨¢s. Era otra orla en su impresionante palmar¨¦s. Sin embargo, su carrera iba a tener una variante sustancial.A la vuelta de unas merecidas vacaciones se sinti¨® mal y en un examen que le hizo su mujer, Ann, m¨¦dico del equipo brit¨¢nico de remo, se le descubri¨® que padec¨ªa diabetes. El pasado 20 de octubre se hizo p¨²blica su dolencia, pero tambi¨¦n su nuevo gran reto. Seguir¨ªa aspirando a lograr su quinto t¨ªtulo ol¨ªmpico en los Juegos de Sydney 2000. Seg¨²n los m¨¦dicos, el nivel de la enfermedad tiene un grado que no le impedir¨¢ continuar en la ¨¦lite. El tampoco lo har¨ªa si no tuviese garant¨ªas de ganar como hasta ahora.
Redgrave, un atleta de 1,96 metros de altura y 102 kilos de peso, tendr¨¢ 38 a?os en el a?o 2000. Antes, podr¨¢ tambi¨¦n su-mar dos entorchados mundiales m¨¢s, en 1998 y 1999. Desde 1992 no ha perdido una sola regata y ha disputado m¨¢s de 70.
Su primer gran triunfo fue la medalla de oro en los Juegos de Los ?ngeles 84, hace ya 13 a?os. Y lo hizo en el cuatro con timonel, un barco que dejar¨ªa por el dos sin timonel, su preferido para el ¨¦xito durante largos a?os. Con uno de sus compa?eros de 1984, Andrew Holmes, venci¨® en Se¨²l 88 y ya en Barcelona 92 y Atlanta 96 form¨® pareja con Matthew Pinsent, que le ha acompa?ado en sus ¨²ltimos t¨ªtulos mundiales, incluido el de este a?o en cuatro sin timonel, el ¨²ltimo barco victorioso, junto a los j¨®venes Tim Foster y James Cracknell. Mientras su t¨¢ndem con Holmes ten¨ªa la fuerza en el antagonismo de ambos, con Pinsent, nueve a?os m¨¢s joven, encontr¨® su complemento ideal. Seis a?os de imbatibilidad y potencia les contemplan.
Redgrave ha sido un revolucionario del remo, deporte pionero desde el siglo pasado en sus bases brit¨¢nicas del T¨¢mesis. Un a?o antes de su primer t¨ªtulo, en 1983, dej¨® de hacer excesivo trabajo de musculaci¨®n -"no quer¨ªa ser un ciclista o un culturista", lleg¨® a decir-, y pas¨® mucho m¨¢s tiempo en el agua, remando. En el tradicional Henley, desde las ocho de la ma?ana, seis o siete horas diarias, 49 semanas al a?o. Ninguna bicoca. El precio de la gloria.
En el Reino Unido ha habido un precedente de deportista diab¨¦tico, el ex futbolista internacional del Tottenham, Gary Mabbut. Lo llev¨® durante un tiempo mejor que el bosnio del Celta de Vigo, Goran Juric, que con 31 a?os no pudo ni empezar la temporada 1993-1994. Pero hay casos y casos. Ten¨ªa diabetes en grado 1, el m¨¢ximo nivel. No hab¨ªa comparaci¨®n con Mabbut ni con Redgrave, al que vigilar¨¢ su mujer y su entrenador, un ex de la RDA, J¨¹rgen Grobler, que en principio est¨¢ libre de sospecha.
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