Un informe t¨¦cnico destapa que la M-30 tiene siete tramos inundables

VIENE DE LA P?GINA 1Los t¨¦cnicos del Cedex ya avanzaron en abril de 1996 que "las reducidas dimensiones de la cuneta, con apenas capacidad para la escorrent¨ªa de la propia calzada, no pueden drenar las aguas externas procedentes del club Puerta de Hierro". Una descripci¨®n que corresponde fielmente a lo que por dos veces ha ocurrido en este tramo de la M-30 en los ¨²ltimos 10 d¨ªas.

Pero los expertos de Fomento no se limitaron a tomar nota del problema, sino que tambi¨¦n adelantaron su soluci¨®n: "Se aconseja construir una cuneta de guarda que desag¨¹e en la embocadura de la futura obra del arroyo del Fresno. Complementariamente se debe permeabilizar la barrera de seguridad de la mediana para que en situaciones cr¨ªticas permita al menos el desag¨¹e a trav¨¦s de las calzadas".

A los 18 meses de emitido el informe, la nula respuesta de Fomento a esta propuesta de mejora de sus propios t¨¦cnicos ha causado malestar en el Ayuntamiento de Madrid.

No s¨®lo el alcalde, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, del PP, ha pedido a Fomento, encargado del mantenimiento de la ronda, que invierta en la M-30, sino que el concejal de Medio Ambiente, Adriano Garc¨ªa Loygorri, jug¨® la semana pasada con la iron¨ªa de reenviar el informe del Cemex al Ministerio Fomento, la instancia que precisamente lo solicit¨® y de la que este peri¨®dico trat¨® durante dos d¨ªas, y sin ¨¦xito, de recabar su versi¨®n.

Pero el an¨¢lisis de los t¨¦cnicos no se detiene en el neur¨¢lgico kil¨®metro 24 de la M-30. Los t¨¦cnicos encargados del informe incluyeron en su lista otras seis zonas de riesgo. Y de cada uno de estos puntos ofrecieron a la Direcci¨®n General de Carreteras una descripci¨®n de los peligros que les acechaban y una receta para conjurarlos.

Enlace con la carretera de Colmenar. Aqu¨ª, se?alaron los t¨¦cnicos del Cemex, no hace falta que llueva mucho para que se registren inundaciones. "El alto coeficiente de escorrent¨ªa de las ¨¢reas asfaltadas es capaz de provocar inundaciones sin necesidad de precipitaciones de car¨¢cter extraordinario", dice el informe. Para atajar el problema bastar¨ªa, seg¨²n los expertos, con una simple ampliaci¨®n del desag¨¹e y de los sumideros, as¨ª como un aumento de la capacidad de evacuaci¨®n de las cunetas.

Puente de la Princesa. Los dos carriles de la M-30 quedaron completamente inundados el 24 de junio de 1995 en este punto del kil¨®metro 13,700. Uno de los motivos fue el retraso en la apertura de una compuerta del r¨ªo Manzanares. Pero el informe tambi¨¦n destaca "peque?as cuencas urbanas cuyas aguas escurren directamente hacia la calzada, sin que se observen desag¨¹es capaces de evacuarlas al r¨ªo". Ante esta situaci¨®n, los t¨¦cnicos aconsejaron revisar el sistema de drenaje.

Puente del Rey. Fue el punto m¨¢s afectado por la inundaci¨®n de 1995, principalmente por el desbordamiento del arroyo Meaques, cuya cabecera se sit¨²a entre Aravaca y Pozuelo, y que discurre hacia el Manzanares a trav¨¦s de la Casa de Campo. El Ayuntamiento de Madrid ya ha construido las obras necesarias para evitar el desbordamiento de este arroyo, pero los t¨¦cnicos recordaron en su informe que en el anegamiento tambi¨¦n intervinieron "agentes causales ajenos".

Se trata de las escorrent¨ªas generadas por la fuerte pendiente de los accesos a la N-V y al paseo de Extremadura. Los expertos aconsejaron captar estas aguas antes de que alcancen la M-30 y evacuarlas directamente al r¨ªo o al colector de su margen derecha.

Arroyo del Fresno. El informe revela que este caudal, "uno de los m¨¢s importantes de Madrid", se topa con la M-30 en el kil¨®metro 26, pero que la obra de desag¨¹e era "claramente in suficiente". A la vista de estos hechos, solicitaron una solu ci¨®n r¨¢pida: "Resulta imprescindible la construcci¨®n de una nueva obra de desag¨¹e que su pere incluso la capacidad del conducto (actual), de forma que los caudales que no tengan cabida en ¨¦l puedan salir al exterior, una vez cruzada la carretera, y circular camino del r¨ªo Manzanares por la superficie de los campos de deporte all¨ª ubicados".

Glorieta,de Nueva Zelanda y San Mart¨ªn. Los t¨¦cnicos destacaron que el peligro en este tramo procede de la falta de un sistema de captaci¨®n proporcionado a los caudales que all¨ª llegan. Para evitar la inundaci¨®n consideraron "preciso" la construcci¨®n de una nueva obra que recogiese el agua desde el punto bajo de esta glorieta y la condujera hasta el colector municipal o bien a un arroyo situado al otro lado de la M-30. Asimismo pidieron una bajante al final de la cuneta que fuese capaz de absorber las aguas de la propia carretera.

Glorieta de Mariano Salvador Maella. En este punto confluyen los flujos del. sinf¨ªn de empinadas calles que bordean Monforte de Lemos y Cardenal Herrera Oria. Todo un caudal capaz de superar taludes y aterrar cunetas, como ya se demostr¨® en 1995. Para evitarlo, los t¨¦cnicos pidieron dos puntos de captaci¨®n, uno justo en la zona inferior de la glorieta y otro complementario, que permitiesen liberar las aguas hasta el colector o bien hacia una cuneta que deber¨ªa ser ampliada. Asimismo, recomendaron al Ayuntamiento que adoptase alguna medida para reducir la salida de agua de los colectores.