Las calles semidesiertas, los bares cerrados

La noche del martes, los bares de Nerva que normalmente est¨¢n abiertos hasta las tres de la madrugada cerraron pronto. Ayer, los padres acompa?aron a sus ni?os hasta la puerta del colegio. Las calles aparec¨ªan semidesiertas.

La funeraria del pueblo se llama Santa B¨¢rbara, como casi todas las funerarias, y nunca se hab¨ªa visto en una igual. El encargado, Fernando Cerezo, regresaba de la iglesia: "Ayer enterramos a dos, y ahora vengo de pagarle al cura por el tercero".

Las obras del vertedero han provocado tensiones, broncas, amenazas, incluso brotes de violencia. Ayer mismo, alguien puso una falsa bomba, montada con cables y cartones, a la puerta de la casa del alcalde, el socialista Jos¨¦ Villalba. Pero nadie en Nerva recuerda un crimen de verdad.

Las malas noticias corren como la p¨®lvora. En Arroyo la Plata, una aldea a 30 kil¨®metros de Nerva, se hab¨ªan reunido en el bar Tapas Juanito el due?o, el lotero y el estanquero. El chatarrero asesinado pasaba por esa taberna casi todas las ma?anas, de camino para Sevilla. "No se va a poder salir de casa", se quejaba el lotero.