El Bar?a impone su mejor pegada

El Bar?a acab¨® adornando con goles un partido pre?ado de tristeza. El d¨ªa empez¨® mal, creci¨® mejor y al final el p¨²blico se entretuvo so?ando con la posibilidad de atrapar el liderato perdido. La utop¨ªa dur¨® 10 minutos. Necesitaba el Bar?a meter cinco goles para desbancar al Madrid y se conform¨® con tres. Los azulgrana vivieron de la garra perdida por lesi¨®n de Luis Enrique y del acierto de Anderson. Un expediente m¨¢s para esperar tiempos mejores: no se dio en el campo la mejor¨ªa del d¨ªa del Newcastle, pero los goles evitaron que la grada recayera en el sufrimiento.El Camp Nou, te?ido ayer de pancartas con mensajes enrarecidos, no vive sus mejores momentos. El partido empez¨® contagiando bostezos. Era el Bar?a un equipo partido en dos. Van Gaal dispuso una defensa de cuatro y puso arriba a tres delanteros y a Anderson como ¨²nico hombre en punta. La media se qued¨® vac¨ªa. Con la tendencia de Luis Enrique a buscar el gol, Celades se qued¨® solo sin poder pegar las l¨ªneas. El juego se qued¨® sin la profundidad del d¨ªa del Newcastle: Guardiola estaba ayer sancionado, mientras Iv¨¢n de la Pe?a calentaba banquillo.

El partido, con esas premisas, se convirti¨® en un di¨¢logo de sordos. Nadal y Abelardo acabaron manejando el bal¨®n y enviando pases que mor¨ªan estrellados en la zaga del M¨¦rida o a los pies de Rivaldo. Ni siquiera los extreme?os buscaban los contraataques. Apenas rozaron el ¨¢rea de Hesp con dos remates de Momparlet.

El Bar?a acos¨® sin ¨¦xito a Montoya -el p¨²blico se entretuvo con las extravagantes salidas del portero- hasta que Rivaldo envi¨® un chut en el primer cuarto de hora. Pero la insistencia empez¨® a esbozar el gol: primero fue una minimel¨¦e en el ¨¢rea, despu¨¦s un disparo envenenado de Anderson, y al final lleg¨® gracias a la presi¨®n de la delantera. Fue una jugada que resumi¨® mejor que nunca la espesura de ideas. Giovanni intercept¨® un pase suicida de Sierra, encar¨® directo a Montoya, no chut¨® y cedi¨® el bal¨®n a Luis Enrique, que dispar¨® con inocencia, Rivaldo recogi¨® para centrar hasta que Anderson, lleno de rabia ante tanta indecisi¨®n, no perdon¨®.

El decorado cambi¨® t¨ªmidamente tras el descanso: el Bar?a no pas¨® apuros y se acerc¨® con mayor descaro a la porter¨ªa. Giovanni envi¨® un bal¨®n al palo y Luis Enrique se permiti¨® varios zigzag que rozaron el gol. No falla el asturiano: lleno de coraje, se ech¨® el equipo a la espalda para aclarar un d¨ªa tan confuso. Meti¨® el segundo tras una larga jugada y abri¨® el partido. Anderson provoc¨® penalti y le brind¨® la oportunidad para que Rivaldo se vaya a Arabia, con Brasil, m¨¢s feliz. El brasile?o se sac¨® la espina de la pena m¨¢xima fallada en Oviedo, asumi¨® la responsabilidad y marc¨®.

El p¨²blico se frot¨® las manos pensando en una goleada, pero no lleg¨®. Ciric, abucheado ayer por el p¨²blico, frustr¨® el 3-0 cuando cometi¨® penalti contra Sinval. El partido acab¨® ya sin aliciente y muriendo por inanici¨®n.

Van Gaal y Rexach

El caso Bogarde presidi¨® la trastienda del partido desde que Louis van Gaal, t¨¦cnico del Barcelona, asegur¨® que sus palabras sobre el asunto pronunciadas el pasado domingo se interpretaron mal. El entrenador recrimin¨® a la prensa su actitud y dijo de forma reiterada que nunca se refiri¨® a los directivos cuando manifest¨®: "A veces he de luchar m¨¢s contra mi propia gente que contra la prensa", como si les acusara por haber filtrado el fichaje de Bogarde.Van Gaal exigi¨® que se citen correctamente sus palabras y asegur¨® que el cuerpo t¨¦cnico prefer¨ªa que Ronaldo continuara en el Bar?a, contrariamente a lo que se hab¨ªa deducido de otras manifestaciones de Gerard van der Lem.

Por otro lado, Carles Rexach tiene previsto firmar hoy su contrato como miembro del equip¨® t¨¦cnico del Barcelona. Hasta hoy, Charly ha trabajado en el club azulgrana sin contrato, una situaci¨®n que no es nueva, pues ya se produjo en la ¨¦poca en que era segundo entrenador del equipo con Johan Cruyff como director t¨¦cnico.