Un nacimiento en Bel¨¦n

( ... ) Los hombres somos criaturas del tiempo desde el momento de nuestro nacimiento hasta el de la muerte, ( ... ) por lo que perdemos nuestra identidad cuando no tenemos conciencia del paso del tiempo. Vivir s¨®lo en el presente es ilusorio. Nuestra historia est¨¢ tejida en la f¨¢brica de nuestras vidas. ( ... ) A?o tras a?o, poco antes de que termine el a?o, narramos la historia de un nacimiento, el nacimiento de Jes¨²s. ( ... ) Y s¨®lo la historia de ese nacimiento es algo que no tiene nada que ver con una noticia necrol¨®gica, sino con una "buena nueva" ( ... ) que no es muerte, sino resurrecci¨®n, ya que la muerte misma fue difundida con la inmensa esperanza de un nuevo orden, la nueva creaci¨®n de Dios. ( ... ) El momento de la encarnaci¨®n fue el momento determinante del tiempo. A partir de entonces empezamos a contar los milenios. La historia de ese nacimiento es lo que da sentido a nuestras vidas. ?Y por qu¨¦? Porque esa historia es la historia de la aparici¨®n del Uno que cre¨® el tiempo dentro del tiempo. ( ... ) El Nuevo Testamento celebra ese milagro y ese misterio en m¨²ltiples modos, narrando el significado que se esconde en la simple historia de un nacimiento en las afueras de Bel¨¦n entre esti¨¦rcol y paja. ( .. ) Contra los que afirman que las navidades son sobre todo un trabajo de filigrana, se puede argumentar que esa filigrana es como todas las filigranas: un bello realce de un modelo y de un significado subterr¨¢neo. ( ... ) 24 de diciembre