La nueva joya de Sainz
El piloto espa?ol desarrolla el Toyota para volver a ser campe¨®n mundial
, Carlos Sainz tiene un nuevo diamante que pulir. Las manos del bicampe¨®n espa?ol conocen ya a la criatura que ha de crecer a su vera para convertirse en arma campeona, en la envidia de todos los pilotos. Responde al nombre completo de Toyota Corolla World Rally Car y ha nacido a medio camino entre las mesas de dise?o de la marca en Jap¨®n y los talleres de desarrollo de la escuder¨ªa en Alemania. Sus antecedentes son inmejorables: entronca con coches que han ganado carreras y t¨ªtulos; lo han modelado las mismas manos que crearon otros veh¨ªculos de renombre, como las sucesivas evoluciones del Celica. Y ahora est¨¢ bajo la tutela de un piloto que convierte en oro cualquier volante que toca. El mago Sainz regresa a casa, vuelve a Toyota, y le han regalado la joya de la corona.El madrile?o, doble campe¨®n del mundo en 1990 y 1992, en ambas ocasiones con Toyota, ha comenzado su trabajo de desarrollo del coche con el que disputar¨¢ el Mundial de 1998. Ser¨¢ su 12 a temporada en el campeonato -aunque s¨®lo la d¨¦cima completa- y el octavo coche que conducir¨¢ por las carreteras y pistas de todo el mundo. Con seis de los anteriores ha conseguido ganar rallies -excepto en sus inicios con el antiguo Ford Escort (1987 y 1988) y con el obsoleto Lancia Delta (1993).
Si algo ha caracterizado la trayectoria de Carlos Sainz es su capacidad para hacer evolucionar un coche desde el cero hasta el infinito. Todos los veh¨ªculos que han pasado por sus manos han experimentado una evoluci¨®n notable, sobre todo cuando el trabajo y la habilidad del piloto han recibido el apoyo necesario de su equipo. Ocurri¨® en la primera etapa de Toyota, despu¨¦s en Subaru y ¨²ltimamente en Ford. Y por eso las expectativas ahora son enormes.
El mejor piloto espa?ol de todos los tiempos dispone de medios y tiempo. "La base es buena, pero tenemos mucho trabajo por delante", repite tras los primeros entrenamientos con el Corolla. Y eso es lo que le encanta a Sainz. Trabajar, trabajar, y trabajar. Su muevo coche, adem¨¢s, es el m¨¢s avanzado de los que competir¨¢n en el Mundial, por lo que las posibilidades de ¨¦xito a medio plazo son casi una certeza.
El potencial del Corolla World Rally Car est¨¢ por descubrir, pero merece la confianza inicial como producto del departamento de competici¨®n de Toyota y de la escuder¨ªa TTE (Toyota Team. Europe), que dirige el sueco Ove Andersson en Colonia (Alemania). Ellos lanzaron a Sainz a sus primeros ¨¦xitos y ¨¦ste siempre ha a?orado aquella ¨¦poca. El coche que debutar¨¢ en el Rally de Montecarlo (del 18 al 21 de enero) cuenta, evidentemente, con todos los adelantos.
Destaca el cambio de velocidades secuencial, no en forma de H como en la mayor¨ªa de los coches de calle. Las marchas se suben y bajan en sucesi¨®n y en sentido longitudinal. La gran innovaci¨®n est¨¢ en que se acciona con un peque?o mando electr¨®nico colocado junto al volante. En cada maniobra de cambio de marchas el piloto invierte aproximadamente la mitad de tiempo que con la palanca convencional situada junto al asiento. Sin embargo, el Toyota Corolla tambi¨¦n cuenta con esta palanca, que puede utilizarse si el joystick del volante no funciona bien.
Otra ventaja del nuevo coche de Sainz son sus dimensiones. Se trata de un veh¨ªculo m¨¢s corto y m¨¢s compacto que el Ford Escort que el madrile?o condujo en 1997, por lo que tambi¨¦n es m¨¢s manejable y apto especialmente para tramos revirados. En cambio, la potencia del motor es un apartado en el que Sainz y su gente a¨²n tienen que trabajar, sobre todo para conseguir mejor respuesta a bajas revoluciones. Los ensayos del bicampe¨®n, que se efectuaron en diciembre en Suecia, Francia y Espa?a, y continuar¨¢n pr¨®ximamente con vistas al Rally de Montecarlo, se encaminan a poner el coche a su gusto en lo referente a las suspensiones y la transmisi¨®n.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.