Un ministro m¨¢s cercano a las tesis de Zedillo
Pese al deterioro de la situaci¨®n en Chiapas, el nombramiento de un ministro del Interior m¨¢s pr¨®ximo que el destituido a las tesis pacificadoras del presidente, Ernesto Zedillo, puede facilitar en M¨¦xico la adopci¨®n de medidas encaminadas a crear las condiciones para un acuerdo negociado con el Ej¨¦rcito Zapatista de Liberaci¨®n Nacional (EZLN). Tarea nada f¨¢cil porque si bien el nuevo titular de la dif¨ªcil cartera ha prometido el desarme de todos los grupos alzados en Lacandona, en esas selvas no s¨®lo act¨²an los zapatistas, tambi¨¦n lo hacen grupos paramilitares promovidos hace tres a?os por la Secretar¨ªa de la Defensa (Ministerio de Defensa), seg¨²n la revelaci¨®n efectuada en su ¨²ltimo n¨²mero por la revista Proceso. Observadores pol¨ªticos lamentaron ayer que el ministro hubiera metido en el mismo saco a paramilitares y a zapatistas.Francisco Labastida, que sustituy¨® a Emilio Chuayffet y anunci¨® una pr¨®xima reuni¨®n con la comisi¨®n de concordia y pacificaci¨®n para el Estado de Chiapas, ha sido recibido desapaciblemente o con reservas por la oposici¨®n. Felipe Calder¨®n, l¨ªder del conservador Partido Acci¨®n Nacional (PAN), observa en la trayectoria pol¨ªtica y maneras del nuevo secretario de Gobernaci¨®n la vieja cara represiva del PRVI gubernamental Partido Revolucionario Institucional. Seg¨²n Calder¨®n, el funcionario que deber¨¢ sentar las bases del nuevo di¨¢logo con la guerrilla pertenece al viejo sistema pol¨ªtico, tiene sus propias ambiciones en la carrera presidencial, obedece a las reglas de los grupos de poder y cuenta con "serios antecedentes antidemocr¨¢ticos". Tampoco aplaude el centroizquierdista. Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica. Su direcci¨®n lamenta la postura asumida por Labastida cuando asumi¨® el cargo, al reducir el conflicto de Chiapas a una lucha por la tierra y a diferencias pol¨ªtico-religiosas.
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