El PP perfecciona su Manual de Autoprotecci¨®n

, El Partido Popular (PP) ha contrarrestado internamente la campa?a de acoso terrorista hacia sus dirigentes exigi¨¦ndoles el cumplimiento cada vez m¨¢s estricto, detallado y perfeccionado de una serie de medidas pr¨¢cticas de autoprotecci¨®n. As¨ª, remiti¨® a mediados de diciembre, tras el asesinato en Renter¨ªa de Jos¨¦ Luis Caso, concejal de Ir¨²n, un nuevo Manual de Autoprotecci¨®n Personal a sus principales cargos electos y a sus estructuras territoriales plagado de "inc¨®modos" consejos ya experimentados para evitar riesgos innecesarios. Normas que se basan sobre todo en el "sentido com¨²n".

El manual parte de dos lemas: "La mayor seguridad personal reside en el sentido com¨²n, no en las armas", y "el mejor protector es uno mismo". Luego, se establece una medida general: evitar caer en la rutina y en costumbres fijas. Es decir, se propugna un sistema de vida "irregular" para no dar "ventaja" a los terroristas.El domicilio. Las instrucciones var¨ªan seg¨²n el tipo de la vivienda. Si es un chal¨¦, se precisa la altura de la cerca exterior (2 o 2,5 metros), la resistencia y solidez de las puertas, la conveniencia de videoporteros, porteros autom¨¢ticos y alarmas, las ventanas con persianas con cierre interior, el dormitorio con pestillo y tel¨¦fono dentro, la conveniencia de un perro y la necesidad de no amontonar materiales innecesarios. En un piso, las recomendaciones detallan una buena puerta de seguridad y la cerradura con llave si el ascensor llega al garaje.

Antes de habitar una casa se propone examinarla a fondo, cambiar sus cerraduras si no es nueva y comprobar la protecci¨®n de l¨ªneas de servicio de tel¨¦fono, agua y gas, as¨ª como no poner el nombre en el buz¨®n o la gu¨ªa.

Aspectos convivenciales. La esposa deber¨¢ aleccionar al personal de servicio, extremar su discreci¨®n sobre la categor¨ªa profesional del marido y evitar repetir horarios. Los padres no deben llevar a sus hijos al colegio ni en coches ostentosos ni con ch¨®feres uniformados. Los hijos, adem¨¢s, deben jugar en lugares concurridos. Al personal de la casa, de selecci¨®n "escrupulosa", se le someter¨¢ a pruebas de "discreci¨®n, probidad y fidelidad" hasta que sea de m¨¢xima confianza. Con el portero hay que ser "amable y espl¨¦ndido" para extreme la vigilancia.

El ch¨®fer, adem¨¢s de su funci¨®n propia debe "estar mentalizado de ser un fiel guardi¨¢n". En el veh¨ªculo debe llevar alguna herramienta para amedrantar a un posible atacante. Tiene que revisar cada ma?ana el autom¨®vil, llevar lleno el dep¨®sito, variar los recorridos, acudir a buscar a su jefe 15 minutos antes, esperarlo en la puerta, aparcar algo m¨¢s lejos y conducir por el carril m¨¢s al centro de la calzada.

En la calle y en el despacho. Antes de salir de casa hay que observar desde la ventana la situaci¨®n general de la calle. Ya en el portal, conviene detenerse, mirar a los lados, buscar "personas extra?as" en veh¨ªculos con alguien al volante o en una cabina cercana. Si se ve a "personas extra?as", hay que fijarse en si se les nota bultos en la cintura, si llevan las manos en los bolsillos o en bolsas, o carteras. Al regresar, avisar antes por tel¨¦fono, anunciar la llegada por el portero y no abrir la puerta con la propia llave y llamar con contrase?a.

Instalar el despacho en plantas altas, apartadas del acceso directo al p¨²blico, con alarma dentro, lejos de ventanas orientadas a azoteas u otros edificios. Tambi¨¦n fija la m¨¢xima reserva en viajes y desplazamientos y que no se pasee cerca del trabajo o de casa.

El veh¨ªculo. Para la vida cotidiana se aconsejan modelos nacionales y, si se dispone de varios, usarlos indistintamente. Tambi¨¦n se recomienda variar su estacionamiento, instalar antirrobo conectado a puerta y cap¨®, dep¨®sito con cerradura y garaje. Si el coche se aparca en la calle, se alerta para comprobar antes de usarlo las cerraduras, el tubo de escape, los guardabarros y los asientos.