Nubes y claros
Las listas de fin de siglo se multiplican. Mirando hacia atr¨¢s a modo de pretendido balance, o hacia adelante apostando por quienes pueden ser los nuevos valores, la enumeraci¨®n de obras de arte o de int¨¦rpretes de futuro es, a grandes rasgos, un juego que pone sobre la mesa intuiciones vehementes elevadas a categor¨ªa de trascendentales. La reciente lista de la BBC, reproducida el lunes pasado en este peri¨®dico, sirve de origen a una serie radiof¨®nica y contempla, es un decir, las 100 obras maestras m¨¢s influyentes del siglo XX en todos los campos de la cultura, excepto la m¨²sica. ?Por qu¨¦ se insiste en el aislamiento de la m¨²sica cuando es una de las artes m¨¢s potencialmente cotidianas? No son suficientes las separaciones de m¨²sicas cultas y populares, de contempor¨¢neas y cl¨¢sicas. La capacidad integradora y universal de la m¨²sica se limita a cotos cerrados.El sitio natural de Stravinski o Sch?nberg, en el contexto de este siglo, est¨¢ junto a Picasso, Proust o Renoir, al lado de las artes pl¨¢sticas, la literatura y el cine. Es rid¨ªculo que la palabra m¨²sica aparezca solamente en la lista de la BBC como parte del t¨ªtulo de un cuadro de Matisse o que La consagraci¨®n de la primavera se incorpore ¨²nicamente asociada al bailar¨ªn Nijinsky. Y no es que la selecci¨®n no musical de la BBC sea un modelo de inspiraci¨®n (hay ausencias tan se?aladas como las de Dreyer, Ford, Chaplin, Canetti o Bernhard, al lado de presencias muy discutibles), pero el exilio de la m¨²sica, es sintom¨¢tico. ?Tendremos que empezar a mentalizarnos para ver la influencia de la m¨²sica en el siglo a trav¨¦s de la pintura y otras artes? En ese caso, ser¨ªa oportuno que alg¨²n editor preparase una urgente versi¨®n espa?ola de un libro como Vom klang der Bilder (Prestel-Verlag), en el que se muestran y analizan gran n¨²mero de correspondencias, fascinaciones y encuentros entre los pintores del siglo XX y la m¨²sica. No es nada extra?o. La convivencia entre pintores y m¨²sicos ha sido siempre estimulante (Vermeer y Georges de La Tour han mostrado, por ejemplo, im¨¢genes iluminadoras de los sonidos y silencios) y algo similar ocurre con el resto de los campos de la creaci¨®n. El desplazamiento de la m¨²sica no es de recibo. En otro orden de cosas, el siglo XXI es el protagonista de otra lista de actualidad, la de 120 j¨®venes instrumentistas (se excluyen cantantes y directores de orquesta) menores de 30 a?os seleccionados por Le Monde de la Musique, en su n¨²mero de enero, llamados a tomar el relevo de la gloria. Ninguno de ellos ha nacido en Espa?a. ?Tan poco conocidos son nuestros m¨²sicos, en Francia o es que el nivel no da para m¨¢s? Queda la pregunta en el aire.
Ante tantas nubes tormentosas no viene de m¨¢s recordar que la emblem¨¢tica ciudad de Salzburgo -el Cannes de la m¨²sica cl¨¢sica- acoge este a?o a un ramillete de artistas espa?oles, tras un periodo de considerable sequ¨ªa. En los festivales de verano act¨²a Mar¨ªa Bayo, Carlos ?lvarez, Pl¨¢cido Domingo y Jordi Savall; en el Festival Barroco de Pentecost¨¦s, Mar¨ªa Bayo, Jordi Savall e Isabel Rey; y el pr¨®ximo d¨ªa 25 de enero, en el marco de la tradicional Mozartwoche de invierno, actuar¨¢ la Real Filharmonia de Galicia, dirigida por Helmuth Rilling, y d¨ªas m¨¢s tarde la pianista Alicia de Larrocha.
El proceso de internacionalizaci¨®n musical de Espa?a experimenta una tendencia al alza. Es un fen¨®meno relativamente nuevo, al margen de los divos, y se extiende a agrupaciones e incluso a publicaciones. Como muestra de ello valga citar que el Orfe¨®n Donostiarra, despu¨¦s de su actuaci¨®n en el concierto de fin de a?o de la Filarm¨®nica de Berl¨ªn, con Abbado, se va de gira por Alemania en febrero con la Sinf¨®nica de Galicia, dirigida por V¨ªctor Pablo P¨¦rez y con la pianista Rosa Torres-Pardo. En el campo del periodismo especializado, a la cosmopolita revista de m¨²sica antigua Goldberg, publicada en espa?ol e ingl¨¦s y distribuida desde Pamplona a varios continentes, se une ahora la m¨¢s modesta Doce Notas, dirigida por el compositor Jorge Fern¨¢ndez-Guerra, lanz¨¢ndose a un extenso y magn¨ªfico n¨²mero monogr¨¢fico en franc¨¦s y espa?ol sobre. la m¨²sica contempor¨¢nea de los dos pa¨ªses vecinos.
Son algunos destellos esperanzadores que contrastan con las muchas veces enturbiadas relaciones entre m¨²sica y sociedad, claros y nubes de una manifestaci¨®n art¨ªstica tan viva como en ocasiones incomprendida.
Babelia
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