El cerrojazo
EN V?SPERAS de la decisiva negociaci¨®n en Washington la semana pr¨®xima, el Gobierno israel¨ª se ha cerrado en banda y ha endurecido su posici¨®n: no ceder¨¢ a los palestinos m¨¢s que otra m¨ªnima parte de Cisjordania, troceada adem¨¢s, reserv¨¢ndose para s¨ª lo esencial de los territorios ocupados en 1967. Aunque no est¨¢ cifrada oficialmente, de la postura aprobada ayer por el Gobierno de Netanyahu se desprende que Israel pretende conservar un 60% de esos territorios en Cisjordania. Puede calcularse que los acuerdos de Oslo de 1993 establecen la retirada israel¨ª de al menos un 80% de esta tierras. ?Estamos ante una nueva y definitiva muestra de intransigencia de Netanyahu y sus ministros, o ante un c¨¢lculo negociador para ceder lo m¨ªnimo posible en Washington y ese m¨ªnimo se presente como una concesi¨®n extra¨ªda como una muela?Seg¨²n el acuerdo anunciado -sin mapas ni grandes detalles, pese a que el Consejo de Ministros se volc¨® sobre ellos-, adoptado ayer y comunicado a los palestinos y a Washington, Israel pretende conservar lo que considera ocho zonas esenciales para sus "intereses nacionales primordiales": es decir, casi todo, desde el valle del Jord¨¢n, la zona de la l¨ªnea de demarcaci¨®n de Israel, territorios en tomo a Jerusal¨¦n, las tierras que rodean a los asentamientos jud¨ªos en Cisjordania, y los terrenos que albergan infraestructuras importantes en materia de suministro de agua, electricidad y transportes, incluidos ejes de cerreteras, adem¨¢s de los lugares santos e hist¨®ricos para los jud¨ªos. Israel s¨®lo devolver¨ªa, as¨ª, una peque?a parte de Cisjordania, parcheada como las manchas en una piel de leopardo.
Desde luego, esta posici¨®n queda muy lejos de la retirada "significativa y cre¨ªble" que Washington le pide a Netanyahu, y refleja el poco efecto que ha tenido la reciente visita del mediador estadounidense, Dennis Ross. El endurecimiento de la postura israel¨ª anunciada ayer se superpone a otro que tuvo lugar la v¨ªspera, cuando el Gobierno de Netanyahu exigi¨®, antes de cualquier retirada, a la autoridad palestina una serie de estrictas medidas que van de la extradici¨®n a Israel de 34 presos por terrorismo a nuevos cambios sustanciales en la constituci¨®n, la Carta Nacional Palestina.
El Gobierno estadounidense frunci¨® ayer el ce?o ante el anuncio israel¨ª. Clinton recibir¨¢ por separado a Netanyahu y a Arafat, y ya ha anunciado que no se limitar¨¢ a escucharles con los brazos cruzados. Dif¨ªcil, sin embargo, le resultar¨¢ que el primer ministro israel¨ª d¨¦ su brazo a torcer cuando, adem¨¢s, ¨¦ste ha esgrimido la amenaza de movilizar el influyente lobby proisrael¨ª en EE UU en defensa de su actitud. Ante tal cerraz¨®n, el objetivo de Clinton podr¨ªa, limitarse a garantizar una nueva y m¨ªnima retirada militar israel¨ª de los territorios ocupados y dise?ar un estatuto final de Palestina que contemplase la estatalidad, aunque fuera lejana y limitada, poniendo a Arafat -quien hace muchos a?os anunci¨® que proclamar¨ªa un Estado palestino aunque s¨®lo fuera en Jeric¨®- en una dif¨ªcil posici¨®n.
Esto ser¨ªa una visi¨®n optimista. Pues si no hay ning¨²n progreso en Washington, puede haber una marcha atr¨¢s entre israel¨ªes y palestinos. "Cualquier cosa es posible", coment¨® ayer Arafat ante la posibilidad de una nueva Intifada. El caso es que este proceso negociador puede estar llegando a la hora de la verdad: al momento de saber cu¨¢les son sus l¨ªmites y dejar las ilusiones para otra ocasi¨®n.
Tras la que aparece ahora como plenamente justificada dimisi¨®n de David Levy, la posici¨®n de ayer refleja el triunfo de los m¨¢s duros en el Gobierno, con su primer ministro a la cabeza de la inflexibilidad y el ex general Sharon a su vera. En los pr¨®ximos d¨ªas se deber¨ªa poder comprobar la realidad de la situaci¨®n. Ser¨ªa de desear que se tratase tan s¨®lo de una estratagema negociador. Pero es de temer que el objetivo de Netanyahu, presionado adem¨¢s por la perspectiva de un adelanto electoral, sea no ceder un paso, cargarse los acuerdos de Oslo y dar el cerrojazo a todo un proceso de paz.
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