Proceso a Sadam

Ni Washington ni Londres desean una guerra con Bagdad, pero parece que ¨¦se es el camino que est¨¢n tomando. Intentan ahora convencer a Sadam Husein de los verdaderos peligros a los que se enfrenta Irak si no permite que los inspectores de armas de la ONU busquen las armas de destrucci¨®n masiva, pero corren el riesgo de verse abocados a la v¨ªa militar por falta de alternativas efectivas. ( ... )Sin embargo, la probabilidad de que los ataques a¨¦reos persuadan a Sadam es muy escasa, y los pol¨ªticos estadounidenses lo saben. Se precisa una estrategia para tratar con Sadam, pero tiene que ser m¨¢s cre¨ªble y aceptable para la opini¨®n mundial que las que se han intentado. Uno de sus puntos de partida debe ser resaltar la distinci¨®n entre el r¨¦gimen de Sadam y el pueblo iraqu¨ª, que es su primera v¨ªctima. ?se es el objetivo del programa petr¨®leo por alimentos destinado a ahorrar al pueblo iraqu¨ª los peores efectos de las sanciones econ¨®micas. ( ... ) Pero estas medidas deber¨ªan acompa?arse de maniobras para privar al r¨¦gimen de cualquier legitimidad internacional. En 1991, la idea de procesar a Sadam ante un tribunal internacional parec¨ªa descabellada. Hoy hay tribunales que act¨²an contra los antiguos criminales de guerra en la ex Yugoslavia y Ruanda. Se espera que una conferencia de la ONU en junio instituya un tribunal criminal internacional permanente. Y si alguien debe sentarse ante ese tribunal, ¨¦se es Sadam.

5 de febrero