La cl¨¢usula democr¨¢tica

La UE dif¨ªcilmente puede negar la entrada a Cuba en el club de los ACP a los que tanto mima alegando su falta de respeto de las libertades y de los derechos humanos que tambi¨¦n infringen numerosos pa¨ªses de ?frica, Incluso el Gobierno espa?ol, que mantiene una tensa relaci¨®n con La Habana, es favorable a su ingreso y as¨ª se lo ha manifestado a sus socios europeos.

Ahora bien, el Convenio de Lom¨¦, como se llama el tratado entre la UE y los ACP, contiene una cl¨¢usula democr¨¢tica que permite suspender buena parte de sus beneficios a los pa¨ªses que no respetan m¨ªnimamente las reglas democr¨¢ticas. El comisario europeo que lleva los ACP, Joao de Deus Pinheiro, ha anunciado ya que este aspecto debe ser incluso reforzado en el pr¨®ximo tratado, a partir del 2000.

A diez pa¨ªses africanos, encabezados por Sud¨¢n, se les aplica actualmente la cl¨¢usula democr¨¢tica y, en consecuencia, no disfrutan de buena parte de las ayudas comunitarias. Es probable que, cuando Cuba se adhiera al club, le suceda otro tanto. De ah¨ª que el vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Manuel Mar¨ªn, considere que fomentar su ingreso es un ejercicio in¨²til.