El acoso sexual m¨¢s caro del mundo
Una empresa de EE UU paga 1.500 millones por el hostigamiento a sus empleadas durante 15 a?os
Como acoso sexual resulta casi inimaginable: durante 15 a?os, nadie (del sexo masculino, claro), se priv¨® de nada. Altos directivos y mandos intermedios de una empresa estadounidense, Astra, que fabrica productos farmac¨¦uticos, disfrutaron a todo tren de sus subalternas, contratadas especialmente para ese fin. Descubierto el pastel, las amenazas judiciales y la inmensa presi¨®n p¨²blica en un pa¨ªs especialmente sensible a estos abusos han llevado a la empresa a pagar casi 10 millones de d¨®lares (m¨¢s de 1.500 millones de pesetas). Se trata de la mayor cantidad de dinero jam¨¢s abonada de un golpe por delitos de acoso sexual.En 1996 sucedi¨® otro caso de acoso masivo en Chicago, donde unos 2.500 trabajadores se movilizaron y demandaron a la empresa electr¨®nica Mitsubishi por este delito en un controvertido proceso legal, todav¨ªa sin concluir, que puede costarle a la empresa 18.500 millones de pesetas.
Hasta ahora, el r¨¦cord en indemnizaciones por acoso sexual correspond¨ªa a los 190 millones de pesetas que tuvo que pagar el a?o pasado la empresa de contrataci¨®n de agentes Management Recruiters International.
Los 1.500 millones desembolsados por Astra se destinar¨¢n a un fondo que indemnizar¨¢ a m¨¢s de 80 mujeres de la filial norteamericana de la multinacional sueca y que ser¨¢ administrado por la Comisi¨®n de Igualdad de Oportunidades ante el Empleo (EEOC). Seg¨²n ha comprobado la EEOC estadounidense, las v¨ªctimas no s¨®lo fueron intimidadas por los altos ejecutivos, sino tambi¨¦n por los mandos medios, "que crearon un ambiente laboral hostil".
El presidente de la empresa, Ivan R. Rowley, reconoci¨® ayer los hechos. "S¨ª, se acos¨® sexualmente a algunas empleadas, a las que ofrezco mis disculpas. Astra lamenta estos casos de hostigamiento ocurridos en el pasado; como compa?¨ªa, estamos avergonzados por este comportamiento inaceptable".
Las acusaciones se remontan a la administraci¨®n anterior, que instaur¨® durante 15 a?os un sistema de acoso permanente a las subalternas de ejecutivos de nivel alto y medio.
El anterior presidente, Lars Bildman, destituido en 1996, fue acusado de despedir a madres y a mujeres mayores para sustituirlas por "j¨®venes bellas y solteras", que despu¨¦s eran presionadas por sus jefes para' que mantuvieran relaciones sexuales con ellos. El lema de trabajo de Bildman era que "la empresa Astra demandaba tiempo completo de sus empleados y que un d¨ªa de trabajo incluye fiestas nocturnas".
Jim Lee, uno de los responsables de la EEOC, dijo ayer que un total de 120 mujeres han sido interrogadas durante las investigaciones; y de ellas, alrededor de 80 han sido objeto de alg¨²n tipo de acoso. Se prev¨¦ que el n¨²mero de las afectadas aumente, puesto que las pesquisas todav¨ªa no han finalizado.
El ex presidente de Astra fue condenado la semana pasada a 21 meses de c¨¢rcel por evasi¨®n de impuestos y al pago de una multa al Gobierno de 45 millones de pesetas. Adem¨¢s, Astra le ha demandado por 2.200 millones, ya que Bildman, adem¨¢s de acosar a sus empleadas, desv¨ªo unos 330 millones para "remodelar tres de sus casas".
La EEOC comenz¨® a investigar el caso a ra¨ªz de un reportaje publicado en mayo de 1996 por la revista Business Week, en el que se denunciaban pr¨¢cticas de hostigamiento sexual en la empresa.
En una denuncia presentada contra Astra en 1996, seis empleadas denunciaron que los ejecutivos hab¨ªan "tejido un sistema de acoso sexual para satisfacer sus deseos personales". "En los cursos de capacitaci¨®n para mujeres les dec¨ªan que sus evaluaciones depend¨ªan de su disponibilidad social y su socializaci¨®n con el jefe de turno", asegur¨® Paul Igazaki, presidente de EEOC.
A partir de ahora, la empresa dar¨¢ a sus empleadas un entrenamiento para combatir pr¨¢cticas de hostigamiento sexual y va a vigilar por medio de monitores y polic¨ªas a los empleados con menos de dos a?os de antig¨¹edad. Los ejecutivos involucrados en el caso han dejado de trabajar para la empresa, ya sea voluntariamente o por despido.
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