Rechazo popular en EE UU al fin de la comedia Seinfeld
Estados Unidos est¨¢ profundamente consternado. No porque su presidente sea un s¨¢tiro, sino por la inminente desaparici¨®n de la serie Seinfeld, cuyos protagonistas llevan casi diez a?os asentados en el subconsciente nacional. El pr¨®ximo 14 de mayo se emitir¨¢ el ¨²ltimo cap¨ªtulo de la telecomedia creada por el c¨®mico neoyorquino Jerry Seinfeld en torno a su vida minimalista en un apartamento de Manhattan. El sentimiento popular lo resumi¨® un titular de la revista People: "El pa¨ªs se prepara para la vida sin Seinfeld". "Por favor, que no sea verdad", es otra frase recurrente estos d¨ªas en titulares, editoriales de prensa y conversaciones casuales. Tambi¨¦n el semanario Time acaba de dedicar una portada al fin de Seinfeld, la telecomedia de mayor audiencia y calidad de esta d¨¦cada, y descrita a menudo como la mejor de la historia de la televisi¨®n. Seinfeld, sin embargo, fracas¨® al ser traducida, por ejemplo, en Espa?a, donde la fallida emisi¨®n de un episodio llev¨® a su cancelaci¨®n inmediata.Quiz¨¢ si Seinfeld hubiera sido tan s¨®lo una excelente telecomedia podr¨ªa haber triunfado en el mercado internacional. Pero era mucho m¨¢s que eso: era parte integral de la vida en EE UU, con tanto seguimiento como las hamburguesas, el baloncesto y el atardecer. Heredera de lo mejor de la historia del medio (The Honeymooners, Mary Tyler Moore, Cheers ... ), Seinfeld ahora s¨®lo tiene un posible sustituto en la cumbre: Frasier.
Seinfeld era conocida como una serie "acerca de la nada". Con su concepci¨®n totalmente ins¨®lita, trajo nuevos argumentos y un nuevo humor a la televisi¨®n, imposible de explicar, mezcla de Woody Allen, Abbott y Costello y Dad¨¢. Su retrato de los a?os noventa en EE UU ha evolucionado de manera tan intr¨ªnseca a la evoluci¨®n real de la d¨¦cada que a menudo se confunden. Ejemplo: hace poco, en el mundo real, una mujer consigui¨® que despidieran a un compa?ero de trabajo por contarle el argumento de un episodio en el que Jerry se olvida del nombre de una amante y s¨®lo sabe que rima con una parte de la anatom¨ªa femenina. El despedido (por acoso sexual) recurri¨® a los tribunales y obtuvo una compensaci¨®n de 26 millones de d¨®lares.
Otros temas recurrentes en la serie han sido las relaciones fracasadas, los tics de gente odiosa, el mal aliento, el rid¨ªculo y los restaurantes chinos. Como todas las historias de ¨¦xito, Seinfeld fue un fracaso al empezar su emisi¨®n en 1989. En 1991 regres¨® con fuerza a la programaci¨®n y desde entonces es el programa m¨¢s visto en EE UU. Econ¨®micamente, Seinfeld supone el 40% de los 500 millones de d¨®lares de ingresos anuales de la NBC, cadena que se queda coja de una pierna con la decisi¨®n voluntaria de Jerry Seinfeld de concluir el programa.
La televisi¨®n estadounidense recibir¨¢ como un bombazo la ausencia de Seinfeld, y se espera un reposicionamiento de toda la competencia en torno a la noche del jueves. Esa noche pertenece hist¨®ricamente a la NBC, y se dice que la cadena cobrar¨¢ un mill¨®n de d¨®lares por cada 30 segundos de publicidad durante el ¨²ltimo episodio, que ser¨¢ un especial de una hora.
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