Panucci se re¨²ne con Sanz y pide perd¨®n por haber abandonado el entrenamiento
Christian Panucci pidi¨® ayer perd¨®n. Primero se disculp¨® ante sus compa?eros, luego habl¨® con Jupp Heynckes y por la tarde se reuni¨® con Lorenzo Sanz. "Estov nervioso y reconozco que me equivoqu¨¦ al dejar el entrenamiento el jueves". El lateral italiano acudi¨® al estadio Bernab¨¦u acompa?ado de su representante, Tiberio Cavalleri, y durante cerca de una hora se desahog¨® con el presidente del Real Madrid. "Estoy feliz aqu¨ª. No me ir¨ªa al Milan ni por 1.000 millones", dijo. El Milan est¨¢ dispuesto a recuperar al jugador si sus problemas en el Madrid no se solucionan.
Panucci abandon¨® el entrenamiento el jueves cuando Jupp Heynckes le entreg¨® el peto correspondiente al equipo reserva en el partidillo de entrenamiento. Adujo problemas musculares y se march¨® a la ducha antes de tiempo. Todos los presentes notaron que la reacci¨®n del italiano ten¨ªa m¨¢s que ver con su estado de humor que con una posible lesi¨®n. Panucci reconoci¨® ayer su enfado. "Me equivoqu¨¦. Soy un poco tonto porque siempre quiero jugar. Pero he pedido perd¨®n a mis compa?eros, al entrenador y al presidente".El italiano reconoce que est¨¢ nervioso. Sus compa?eros cerraron ayer filas con ¨¦l. "Yo le entiendo. Tiene problemas personales", dijo Suker. "Ha habido un malentendido y ya est¨¢ solucionado. Es un chico muy educado", a?adi¨® Mijatovic. Panucci est¨¢ preocupado por la salud de su madre, por quien siente una especial devoci¨®n, pero tambi¨¦n echa de menos a Capello, quien le trajo al Madrid hace 13 meses, y no se entiende con Heynckes.
La relaci¨®n de Panucci en el Madrid se ha ido deteriorando progresivamente desde que Capello dej¨® el club. Fue en el partido contra el Barcelona el 1 de noviembre cuando la situaci¨®n estall¨®. Heynckes le sustituy¨® y Panucci, visiblemente enfadado, se dirigi¨® al banquillo: "Esto es una falta de respeto para un profesional. No voy a jugar en un mes". Cuatro d¨ªas despu¨¦s Panucci se resinti¨® de una lesi¨®n en el tobillo. Cuarenta d¨ªas m¨¢s tarde y en vista de que sus problemas f¨ªsicos no se solucionaban, Panucci pidi¨® permiso para marcharse a Mil¨¢n. Explic¨® al club que en Madrid se sent¨ªa solo. En Italia se puso en manos del m¨¦dico del Milan y los rumores de que Panucci quer¨ªa volver con Capello estallaron.
A mediados del mes de enero, Panucci volvi¨® a protagonizar otra pol¨¦mica. "El equipo corre este a?o menos", dijo. Al final culp¨® a la prensa de no entenderle y decidi¨® no hacer declaraciones hasta el a?o 2003. En esos d¨ªas el ayudante de Arrigo Sacchi, Pincolini, le llam¨® para preguntarle por el Madrid. Panucci entiendi¨® que Sacchi pod¨ªa entrenar al Madrid y se puso a¨²n m¨¢s nervioso. Se lo cont¨® a sus compa?eros en un momento en que los rumores sobre la continuidad de Heynckes abundaban.
En Anoeta, Panucci tuvo que jugar como central. Ese d¨ªa mantuvo una fuerte discusi¨®n con Redondo, luego con Seedorf y al final la tom¨® con Jaime. Roberto Carlos, tras el partido, hizo una advertencia: "Esto no puede seguir as¨ª, tenemos que hablarlo en el vestuario". La plantilla intent¨® luego restar importancia a este enfrentamiento.
Esta semana, Panucci ha vuelto a verse inmerso en otro conflicto. Ahora est¨¢ molesto porque ve que puede quedarse de nuevo en el banquillo. "Quiero cumplir mi contrato; otra cosa ser¨¢ si no juego". Heynckes le llam¨® el martes, seg¨²n cont¨® el jugador, para que acudiera a su casa. El t¨¦cnico intent¨® calmarle. La relaci¨®n entre ambos es muy dif¨ªcil. Sus peleas, a veces a gritos, no se escapan a nadie.
La cita de ayer en el Bernab¨¦u a la que acudi¨® Panucci con su agente fue para pedir disculpas y hablar de su contrato. "He recibido bastante informaci¨®n", dijo Sanz, quien a?adi¨®: "Si alguien le quiere tiene que pagar 15.000 millones [su cl¨¢usula]". Pero Panucci siempre advierte que tiene un compromiso personal con el presidente por el cual puede irse si lo desea. "No tiene sentido retener a un jugador contra su voluntad". A final de temporada, si Panucci decide irse, el Madrid escuchar¨¢ ofertas. Por 2.000 millones el italiano podr¨ªa regresar con Capello.
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