Explicaciones sobre la eutanasia

E! se?or embajador de los Pa¨ªses Bajos dice en su Aclaraci¨®n, publicada en EL PAIS el 18 de febrero, que son err¨®neas las cifras dadas por m¨ª el 6 de febrero; a saber: que en 1995 murieron en Holanda 19.600 ciudadanos de muerte inducida por medios sanitarios y que de esas muertes s¨®lo 6.000 fueron a petici¨®n del paciente, pues, seg¨²n ¨¦l, "s¨®lo en 900 casos el facultativo puso t¨¦rmino a la vida sin solicitud expl¨ªcita del paciente".

Para subrayar el hecho de que la eutanasia voluntaria nunca va sola, sino que lleva inevitablemente consigo la eutanasia impuesta, bastar¨ªa pensar en esas "s¨®lo" 900 personas que, seg¨²n reconoce el se?or embajador, fueron eliminadas sin saberlo ellas en su pa¨ªs en 1995.

Sin embargo, por desgracia, ¨¦sa no es toda la verdad. A esas 900 personas se les aplic¨® la llamada "eutanasia activa", es decir, se las elimin¨® por medio de una inyecci¨®n mortal u otro me dio directamente mort¨ªfero, sin que ellas lo hubieran pedido. Pero para completar el cuadro es necesario tener tambi¨¦n en cuenta los casos de la llamada "eutanasia pasiva", es decir, aquellos en los que se puso fin a la vida del paciente no por una acci¨®n letal, sino por la omisi¨®n de cuidados normales (no desproporcionados), como la eliminaci¨®n o la oxigenaci¨®n. Aqu¨ª las cifras deben ser tomadas con mayor reserva, pues la encuesta en la que se basan no ha sido suficientemente precisa a este respecto. Sin embargo, no se debe silenciar totalmente que los casos de este tipo llegaron en el a?o del que se trata a los 15.100. Si a esta cifra se le suman los 4.500 casos de eutanasia activa (voluntaria e involuntaria), se alcanza el total de 19.600 casos de muerte inducida.

Yo no dije que "a 13.000 pacientes les fue practicada la eutanasia sin su consentimiento". Evit¨¦ conscientemente esta expresi¨®n para no inducir al error de pensar que se trataba siempre de casos claros de "eutanasia activa". Lo que dije, y creo que se ajusta a la realidad, es que de las 19.600 personas que murieron de muerte inducida (por. acci¨®n u omisi¨®n) s¨®lo 6.000 sab¨ªan lo que estaba pasando; si somos exactos, algunas menos: 5.700. Por lo dem¨¢s, pienso que las "garant¨ªas de reserva y cuidados" para la pr¨¢ctica de la eutanasia son garant¨ªas para pr¨¢cticas criminales que suponen un grave retroceso en las buenas costumbres laboriosamente adquiridas por nuestra civilizaci¨®n durante milenios. No deseo en modo alguno tales "garant¨ªas" para Europa ni para nuestro pa¨ªs.— . Secretario de la Comisi¨®n Episcopal para la Doctrina.