Deep Forest proponen el "turismo musical" a trav¨¦s del mundo
Los m¨²sicos franceses re¨²nen en su nuevo disco voces de ?frica y Centroam¨¦rica
Deep Forest, el grupo que componen los franceses Michel S¨¢nchez y Eric Mouquet, ha creado, m¨¢s que un estilo, una tendencia. Ellos han recogido cantos y m¨²sicas de lugares tan distantes como Madagascar y Cuba, de los pa¨ªses del Este o de los pigmeos, para luego componer, bas¨¢ndose en ellos, sus piezas con sintetizador. Ganadores de dos premios Grammy y con tres millones de ¨¢lbumes vendidos, Deep Forest dicen no aprovecharse de las m¨²sicas ajenas como afirman sus cr¨ªticos. "Cuando trabajamos en un disco, tenemos cuidado en que nuestra m¨²sica no se sobreponga al canto", afirman.Su m¨¦todo de trabajo en este amplio proyecto, que va por la tercera entrega, se parece al de una expedici¨®n cuidadosamente preparada. "Lo primero que hacemos es seleccionar algunas de las grabaciones de los pa¨ªses que nos interesar¨ªa visitar. Luego enviamos a una colaboradora, que es sonidista profesional de voces, para que vaya recogiendo los cantos que le parezcan interesantes. Los escuchamos y, seg¨²n eso, vamos nosotros unas cuantas semanas al lugar, sea Madagascar, M¨¦xico o Cuba. Al volver a casa es cuando empezamos realmente a componer sobre esa base", dice Michel S¨¢nchez.
Como ambos son compositores y ninguno canta, la b¨²squeda se orienta principalmente a las voces. "Nos interesan las voces, las m¨¢s inusuales, tratamos de mezclar distintas culturas en la misma canci¨®n, y cuando tenemos preparada esa parte, empezamos a construir alrededor con nuestro sintetizador", contin¨²a S¨¢nchez.
Los miembros de Deep Forest no consideran que su labor tenga el valor de una investigaci¨®n musical exhaustiva. "Hay cierto aspecto tur¨ªstico en nuestro trabajo", dice Eric Mouquet. "Cuando vamos a los lugares nos tomamos dos o tres semanas para entrar en contacto con la gente y conocer c¨®mo viven, igual que cualquier persona que desea conocer un pa¨ªs. La raz¨®n de nuestros viajes es la m¨²sica, pero tambi¨¦n el placer de viajar".
Pero S¨¢nchez no olvida el objetivo de difundir el tesoro de sus hallazgos. "Es cierto que disfrutamos en el trabajo de campo, preguntando a la gente por el origen de su m¨²sica, pero cuando tenemos toda la informaci¨®n dejamos de pensar en ello y pensamos s¨®lo en lo que podemos aportar art¨ªsticamente. Nuestro principal objetivo es que mucha gente pueda tener conocimiento de antiguos cantos de distintas partes del mundo, pero no lo es publicar largos libros explic¨¢ndolo".
"Muchos artistas perdieron el norte y la relaci¨®n con sus ra¨ªces musicales a causa del rock and roll, el pop y el rap. Se pensaba que la otra era m¨²sica del pasado. Pero ahora hay una recuperaci¨®n de estas m¨²sicas en todo el mundo", apunta S¨¢nchez.
La apropiaci¨®n que hace Deep Forest de m¨²sicas ajenas no es bien vista por todos. Sin embargo, ellos dicen ser muy respetuosos con la m¨²sica que utilizan. "Somos compositores y arreglistas desde hace muchos anos, aunque con antecedentes distintos", contin¨²a Mouquet. "Me gusta poner cierta m¨²sica en evidencia, y por eso intento preservar la integridad, tal vez no del canto en s¨ª, pero s¨ª el esp¨ªritu de las grabaciones originales. Por eso, cuando trabajamos en un disco, tenemos cuidado en que nuestra m¨²sica no se sobreponga al canto".
"Hay otra gente que est¨¢ usando voces ex¨®ticas en sus mezclas, pero les interesa s¨®lo un parte que luego repiten incesantemente en sus composiciones para el baile". "Creo que en la m¨²sica que hacemos usamos nuestra propia cultura, la tradici¨®n francesa, las armon¨ªas complejas. Michel tiene una formaci¨®n cl¨¢sica y yo soy autodidacto, pero ambos compartimos el gusto por los compositores franceses de principios de siglo, como. Ravel y Debussy. No tratamos de hacer algo a la moda, sino un trabajo de composici¨®n serio", concluye Mouquet.
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