El alcalde de Melilla rechaza por decreto la moci¨®n de censura del PP para echarle

El alcalde-presidente de la ciudad aut¨®noma de Melilla, Enrique Palacios, de 46 a?os, emiti¨® ayer un decreto en el que dispone "la no admisi¨®n de la moci¨®n de censura y, en consecuencia, no haber lugar a convocar el pleno solicitado" por los 13 diputados del PP. Palacios present¨® dict¨¢menes de dos profesores de Derecho Constitucional de las universidades de Granada y Almer¨ªa, que consideran ilegal la moci¨®n presentada el pasado d¨ªa 4 por el PP minutos despu¨¦s de su toma de posesi¨®n.

El presidente de Melilla advirti¨® adem¨¢s que no consentir¨¢ alteraciones del orden p¨²blico en el interior de la sede del Gobierno el pr¨®ximo domingo, cuando se cumple el plazo para la celebraci¨®n del pleno solicitado por el PP para votar la moci¨®n de censura. Al mismo tiempo, Palacios emplaz¨® al delegado del Gobierno en Melilla, Enrique Beamud, para que garantice el mantenimiento del orden ante eventuales actuaciones de los que calific¨® como "abertzales de extrema derecha del PP", y ha ordenado a los funcionarios municipales que no trabajen el domingo.M¨¢s de uno teme que puedan producirse des¨®rdenes. Palacios, que lleva en el cargo poco m¨¢s de una semana, no permitir¨¢ que se vote la llamada contramoci¨®n del PP. Esta curiosa denominaci¨®n tiene cierta base, porque surgi¨® minutos despu¨¦s de que Palacios tomase posesi¨®n de la presidencia de Melilla tras una moci¨®n de censura que tard¨® un a?o en votarse. La moci¨®n de censura contra el alcalde del PP, el m¨¦dico militar Ignacio Vel¨¢zquez, de 44 a?os, se inici¨® el 1 de marzo del a?o pasado. En aquella ocasi¨®n, Vel¨¢zquez prohibi¨® a Palacios emitir el voto que le derrocaba. Un a?o despu¨¦s, tras resoluci¨®n del Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa (TSJA), Palacios pudo votar y qued¨® al frente, del Gobierno de Melilla, apoyado por todos los partidos y con la oposici¨®n del PP.

Mayor¨ªa popular

Entretanto, el grupo popular cuenta con mayor¨ªa de 13 contra 12 en la Asamblea, gracias a la renuncia al esca?o del ex diputado musulm¨¢n del PP Abdelmalik Tahar, quien ha declarado ante los tribunales que procedi¨® as¨ª por haber recibido una promesa de un pago de 50 millones de pesetas.Ahora, con su rehecha mayor¨ªa, el PP pretende recuperar la alcald¨ªa de Melilla y argumenta: "La presidencia de la ciudad, ostentada por Enrique Palacios, ha sido obtenida gracias a un episodio de transfuguismo -que se cuenta entre los m¨¢s vergonzosos de la historia de la democracia espa?ola" . A?ade que Palacios "carece de la mayor¨ªa necesaria para poder gobernar". Como tercer fundamento de la contramoci¨®n de censura, el PP menciona la heterogeneidad de los Grupos que respaldan a la Presidencia de la Ciudad -PSOE, Coalici¨®n por Melilla, Uni¨®n del Pueblo Melillense y Grupo Mixto- y la l¨®gica diversidad de los programas electorales e ideol¨®gicos que los inspiran" como un obst¨¢culo insalvable para la acci¨®n diaria de Gobierno.

Entre los argumentos para no convocar el pleno, el decreto presidencial cita que presentar una moci¨®n de censura "sobre un programa que no ha empezado a desarrollarse" implica que "adem¨¢s de estar realizando un acto de mala fe pueden estar incurriendo en lo que en teor¨ªa general se conoce como abuso de Derecho", es decir abuso de poder.

Argumenta el decreto presidencial que el PP present¨® la moci¨®n cuando ni siquiera el nuevo equipo de Gobierno de Melilla hab¨ªa tomado posesi¨®n de sus cargos, en base a "unas elucubraciones de tipo pol¨ªtico sin relaci¨®n alguna con la gesti¨®n, la cual no se ha iniciado".

Palacios pidi¨® ayer a la poblaci¨®n no caer "en las provocaciones" y reconoci¨® que ha ordenado cambiar las cerraduras de su despacho en la Presidencia, porque no se f¨ªa de su antecesor y de quienes se llevaron hasta el fax al abandonar el poder.