Un reloj que adelanta y atrasa

El reloj con el que el Gobierno regional, del PP, pretende decretar los horarios de bares de copas y discotecas se ha vuelto loco. Es un reloj indeciso que adelanta y atrasa. En los ¨²ltimos cinco meses, el PP ha manejado tres propuestas horarias distintas.El consejero de Presidencia, Jes¨²s Pedroche, intent¨® desarrollar en noviembre los aspectos horarios de la Ley de Espect¨¢culos. Sus colaboradores elaboraron un reglamento flexible: los bares de copas y discotecas podr¨ªan cerrar una hora m¨¢s tarde, y los Ayuntamientos tendr¨ªan capacidad para recordar una hora esos l¨ªmites por cuestiones excepcionales. Aquel reglamento fue retirado horas antes de que Pedroche se reuniera con empresarios y vecinos. Se present¨® otro muy distinto: los horarios no se modificaban y se manten¨ªa en manos de los Ayuntamientos la facultad de reducirlos. La decisi¨®n fue apoyada por los vecinos y rechazada por los empresarios. Lleg¨® enero y los due?os de bares de copas anunciaron una huelga a la japonesa: cumplir¨ªan el horario e invitar¨ªan a sus clientes a manifesrse en Sol contra el Gobierno regional. En esas, Pedroche se fue de vacaciones y el presidente regional, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, encarg¨® a su connsejero de Econom¨ªa, Luis Bl¨¢zquez, que resolviera el conflicto. Bl¨¢zquez manipul¨® de nuevo el reloj y prometi¨® una hora m¨¢s a los bares de copas.