Originales y copias
El Museo, Thyssen-Bornernisza presenta la exposici¨®n Willem Kalf Original y copia, la quinta de la interesante serie Contextos de la colecci¨®n permanente. Se trata de muestras con pocas obras, pero de mucha sustancia, a veces por el problema que se plantea; otras, por la importancia del artista en s¨ª, o, como es el caso que ahora nos ocupa, por ambas cosas a la vez.El holand¨¦s Willem Kalf es, sin duda, uno de los mejores bodegonistas de la pintura holandesa del XVII, lo que de suyo le convierte en uno de los mejores de la pintura europea. Por otra parte, a trav¨¦s de una media docena de cuadros suyos, la mayor parte pertenecientes a la colecci¨®n Thyssen-Bornemisza, de Madrid y Lugano, se nos plantea un tema tan apasionante como mal comprendido por el p¨²blico actual: el de los originales y sus copias.
Basta comprobar la permanente orientada resonancia medi¨¢tica del cat¨¢logo de Rembrandt, seg¨²n su ¨²ltima expurgaci¨®n, para comprender la utilidad de una reflexi¨®n seria y en vivo acerca (le este problema, que, en la exposici¨®n de Kalf, cuenta, adem¨¢s, con un reputado especialista como comisario, Sam Segal.
Precisi¨®n
Como tantos otros colegas contempor¨¢neos, Kalf trabaj¨® en escenas de g¨¦nero hasta especializarse en un determinado tipo de naturaleza muerta, a partir de la cual ciment¨® su posterior fama.Entre 1642-1646, Kalf residi¨® y trabaj¨® en Par¨ªs, un momento interesant¨ªsimo de la pintura francesa, lo que enriqueci¨®, sin duda, su estilo.
Su t¨¦cnica es de una precisi¨®n escalofriante en cuanto a su capacidad de plasmar los efectos realistas ¨®pticos m¨¢s sutiles, pero es, sobre todo, el brillante tratamiento de la luz y su refinad¨ªsima combinaci¨®n de gamas fr¨ªas y c¨¢lidas las que han hecho apreciad¨ªsima su obra, que algunos comparan, dentro de su especialidad, con Vermeer.
En la exposici¨®n ahora presentada podemos contemplar comparaciones en directo de originales y copias, cuyos cuidadosos an¨¢lisis, desde todos los puntos de vista, han dado origen a estudios y bellas fotograf¨ªas ilustrativas reproducidos en el cat¨¢logo. Es, en fin, una peque?a gran exposici¨®n totalmente imprescincible.
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